¿Podrías volver a un coche normal, después de conducir un eléctrico?

Un propietario de una unidad del Tesla Model S ha dejado hace tiempo una interesante pregunta al resto de usuarios. ¿Sería posible volver a un coche con motor de combustión interna, después de conducir un coche eléctrico?

En este caso hablamos de cambiar de un Model S a un coche similar. Un cambio radical en todos los sentidos que se ve acentuado por el tremendo potencial de la berlina norteamericana.

Según los usuarios, que ya han llevado el post del foro de usuarios del Tesla a más de 110 páginas, volver a un modelo convencional es una especie de castigo. Cuando por alguna razón, por mantenimiento o por tener que alquilar un vehículo, tienen que volver a la gasolina, las sensaciones son de lo más curiosas.

Aspectos como la lentitud a la hora de la aceleración, los zarandeos de los cambios de marchas, los ruidos, aspectos que algunos comparan con volver de un coche gasolina a coger un coche de caballos.

Es algo que la práctica totalidad de los propietarios de un coche eléctrico destacan, que una vez que los pruebas, y sobre todo una vez que coges plena confianza en las capacidades del coche, la conducción de un eléctrico es un placer. Una experiencia realmente interesante que se valora de una forma muy importante cuando por cualquier razón, tenemos que volver a coger un coche diésel o gasolina.

Algo que se puede extender al resto de la experiencia, ya que no hay preocupaciones por los cambios de aceite, filtros, la correa, la junta de la trócola…una revisión anual que en modelos como el LEAF puede salir por menos de 50 euros, y que nos elimina el temido «taller anxiety».

Por lo tanto, si nunca has conducido un coche eléctrico, es absolutamente recomendable que lo hagas, aunque sea durante una prueba con una unidad del concesionario. Eso si, ya te hemos avisado de que engancha.

Vía | Teslamotorsclub