Baterías portátiles para coches eléctricos. Una buena idea para los desplazamientos largos

Desde hace algunos años son varios los proyectos que proponen una solución al problema de los desplazamientos largos en un coche eléctrico. Una situación que obliga o a tener una red de recarga rápida muy amplia, o a amontonar enormes cantidades de baterías en los coches.

La primera alternativa es costosa, y además difícil de lograr un retorno económico por parte de los operadores. A esto se añade que en esta primera generación un desplazamiento moderadamente largo supondría paradas de 30 minutos cada 100-150 kilómetros.

La segunda alternativa supone aumentar de forma sustancial el precio del vehículo. A esto se añade que tendremos que cargar con cientos de kilos de baterías que no usaremos en el día a día. Algo que no parece la mejor solución a nivel de eficiencia.

La solución podrían ser los extensores de autonomía portátiles. Remolques con packs de baterías que nos permitan realizar largos desplazamientos incluso con un coche eléctrico de primera generación, o simplemente con uno dotado de una batería de tamaño reducido.

Esta idea le ha gustado incluso a Elon Musk. Durante una visita a Francia, el presidente de Tesla ha afirmado que los sistemas portátiles de baterías podrían funcionar para los largos desplazamientos. Uno de estos sistemas es el alemán Nomadic Power. Un proyecto que recientemente ha recibido el respaldo de la UE, que le ha otorgado 2 millones de euros para continuar el desarrollo de esta propuesta.

El principio del Nomadic Power es sobre el papel bastante sencillo. Una batería de 85 kWh, instalada en un remolque conectado a nuestro coche, que nos permite incrementar la autonomía de nuestro vehículo en unos 450 kilómetros adicionales.

La idea de los diseñadores es ofrecer estos remolques en un formato de alquiler. Mediante una red de estaciones, los conductores podrán alquilar una unidad, y devolverla lo más cerca posible a su destino. Unas instalaciones que según sus promotores, no requiere de una gran inversión. Esta prescinde de elementos robotizados, ya que la operación de conexión con el coche es extremadamente sencilla y puede ser realizada por el propio usuario.

Pero la cuestión es que el momento de este tipo de sistemas es ahora. Según se incrementen las capacidades y se reduzcan los pesos de las baterías, perderá sentido el tener que alquilar uno de estos remolques. Pero incluso a nivel particular parece una idea de lo más interesante.

Podemos pensar en un coche que para el día a día cuente con una capacidad de 20 o 30 kWh, mientras que el remolque se queda en casa almacenando la energía de nuestra instalación solar, o acumulando la energía en las horas valle durante la noche. El día que lo necesitemos para un viaje, y ya no sea necesario su trabajo en casa, lo enganchamos y nos lo llevamos.

La clave de todo como siempre, sería el precio.

Vía | Prnewswire

Más info | Nomadic Power