Probamos el Wallbox Commander. Un atractivo punto de recarga con pantalla táctil, y mucho más
7 min. lectura
Publicado: 28/04/2017 14:04
Desde hace unas semanas estamos probando uno de los últimos puntos de recarga en llegar al mercado. El Wallbox Commander. Un cargador que conjuga en una pieza una completa solución para los que necesiten cargar un coche eléctrico, y también para los que lo quieran hacer con un producto con un nivel de diseño elevado.
Diseño Wallbox Commander
Precisamente la presentación es lo primero que llama la atención del Commander. Una caja compacta con unas atractivas formas redondeadas, que se alejan de las simples cajas cuadradas a las que estamos acostumbrados. Un poco de estilo en un mundo principalmente recto y funcional.
Además de la pantalla táctil, otro de los elementos diferenciadores, en el lateral del cargador encontramos una entrada donde podemos encajar la toma que incluye de serie, y que puede ser tanto de tipo 1, para modelos como el Nissan LEAF, Mitsubishi Outlander PHEV…etc, como de tipo 2, para los dotados de una toma Mennekes. Un cable que podremos seleccionar en dos tamaños, 5 y 10 metros, y que cuenta con una toma de Phoenix Contact, algo que nos proporciona una garantía en una pieza de desgaste.
En el interior del Commander nos encontramos con la electrónica, y casi ningún cable (todo encajado en las placas) , un puerto para futuras implementaciones de gestión multi cargador y también un selector de potencia. Un mando que nos permite antes de instalar el cargador, seleccionar a que potencia máxima vamos a recargar. Unas potencias que van hasta los 7 kW en monofásica, y hasta los 22 kW en trifásica.
Una potencia que podremos reducir o aumentar sencillamente desde la pantalla táctil, desde la aplicación móvil o desde la web, por si en algún momento necesitamos usar esos kW en otra aplicación.
Pantalla táctil y funcionamiento
La pantalla táctil era uno de los aspectos que más escepticismo tenía sobre este terminal. Sin duda le proporciona un aspecto moderno y muy atractivo, muy lejos de las simples cajas de plástico con toma de corriente. Como el diseño del cuerpo, todo depende de los gustos y necesidades de cada uno. Algo parecido a lo que sucede con los móviles.
El funcionamiento de la pantalla es correcto. No hay que pelearse con las opciones, por pequeñas que sean. Gracias a esto podremos por ejemplo programar la carga en cuestión de segundos, función muy útil para ahorrar en energía, pero también ver el historial de recargas con un sólo click, sin necesidad de acudir a la app o al portal.
Además, el cargador habla el idioma del usuario, es decir, la información que se representa en pantalla muestra los consumos en km/h, indica la autonomía en kilómetros añadida, etc…… gracias a la base de datos introducida por el fabricante de las diferentes capacidades de batería según la selección previa del vehículo.
También podremos conectarnos a una red Wifi, para de esa forma acceder a las actualizaciones inalámbricas que Wallbox envía de forma remota a sus clientes. Unas mejoras que permiten añadir funcionalidades e ir puliendo cualquier fallo que pudiese aparecer con el uso, y que recibiremos de forma totalmente gratuita. Algo similar a los que hace Tesla con sus vehículos.
Aplicación móvil y portal
Que sería de nosotros hoy en día sin una app que lo controle todo. Wallbox es consciente de esto, y ha diseñado una aplicación para el móvil, desde donde podremos controlar aspectos como la monitorización en tiempo real del consumo doméstico, realizar la programación de cargas, y también podremos descarga de actualizaciones para nuestro cargador. Una app que está disponible tanto para IOS como para Android.
Además de hacerlo desde la aplicación, incluso si no tenemos móvil, podremos también controlar todo nuestro historial y actividad en el portal web. De esta forma sabremos las recargas que hemos realizado en casa, su tiempo, kWh y el coste estimado de la misma. Sin duda una forma perfecta de conocer nuestros hábitos y todo de una forma sencilla y asequible a todos los usuarios.
Incluso desde la web podremos bloquear o desbloquear el cargador a distancia. Por ejemplo, si estamos en el trabajo y llega un amigo o familiar y necesita recargar, con un click podemos facilitarle la operación sin movernos de nuestro asiento.
La cuestión es que diseño y pantalla táctil tienen un precio, 990 euros más IVA. De todas formas para los que no necesiten una pantalla, ni un diseño tan elegante, Wallbox cuenta con una opción más accesible, el Pulsar, que cuenta con un cuerpo más compacto, y está disponible por 690 euros+IVA.
Desde el portal tendremos acceso a la siguiente información:
- Información en tiempo real sobre el estado de la conexión
- Información en tiempo real de tu red eléctrica
- Información en tiempo real para la carga de su velocidad, tiempo y velocidad instantánea de la carga
- Muestra rango añadido del vehículo (km)
- Muestra la batería añadida del vehículo (kWh)
- Control remoto de su carga mediante el bloqueo/desbloqueo para controlar el uso
- Control remoto de la velocidad de carga
Una aplicación web que podéis ver y probar con el usuario de demostración:
www.wallbox.com/mywallbox
Usuario: [email protected]
Contraseña: demo
Lo mejor:
Diseño y calidad general
Toma de Phoenix Contact
Programación sencilla de horarios de recarga
Conectividad Wifi e información del consumo y actualizaciones online.
Lo peor
El precio
Modelos de 22 kW en Tipo 2 o 7 kW en Tipo 1, no hay opción intermedia
Cable de 5 o 10 metros, no hay opción intermedia
No poder configurar la potencia de forma permanente desde la pantalla