Si vas a comprar un coche eléctrico tendrás que contar con estos tiempos de espera
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Publicado: 05/05/2019 10:41
Los coches eléctricos están sufriendo una demanda muy alta en todos los mercados del mundo, y eso es algo que se tiene que notar en los tiempos de producción en fábrica, tanto del propio coche como de sus baterías, y si no, que se lo digan a Tesla y los problemas que sufrieron con la fabricación de su Model 3. La empresa californiana tuvo que resolver los problemas que tenían en su línea de producción a contrarreloj para poder satisfacer la demanda de su nuevo modelo.
Pese a que no todos los países europeos están igual de preparados para el coche eléctrico, parece que cada vez hay más demanda por este nuevo concepto de movilidad. Lo que parece claro es que la producción no está al día con los pedidos que siguen recibiendo las marcas de los clientes, que tendrán que esperar pacientemente durante las semanas que tardará su nuevo coche en producirse, o en el caso de algunos modelos, largos meses.
Los tiempos de espera estimados de los coches eléctricos más vendidos en Europa son los siguientes:
- Nissan Leaf – 3 meses
- Kia e-Niro – 12 meses
- Audi e-tron – 3 meses (como mínimo)
- Nissan E-NV 200 – 12 meses
- Renault Zoe – 5 meses
- Hyundai Kona Electric – 12 meses
- Volkswagen e-Golf – 17 semanas
- BMW i3 – 14 semanas
- Tesla Model S – 2 meses
- Tesla Model 3 – 2 meses
- Tesla Model X – 2 meses
- Jaguar I-Pace – 4 meses
En esta lista destacan los asequibles tiempos de espera de los modelos de Tesla, a la par que otros modelos de combustión interna. Sin embargo, destacan para mal los Nissan E-NV 200, Hyundai Kona Electric y su primo el Kia e-Niro, siendo los tiempos más altos de la lista con 1 año de espera. Un tiempo exageradamente largo y que poca clientes aceptarán.
¿Podrán estos tiempos hacer que los propietarios elijan un coche con una motorización clásica en vez de uno de estos modelos? Seguramente haya personas que no puedan esperar tanto tiempo por estos coches, aunque siempre estará la opción de vehículos de stock en los concesionarios, que suelen ser de entrega casi inmediata.
Los fabricantes tienen que ponerse las pilas -nunca mejor dicho- si lo que quieren es que los clientes se planteen un coche eléctrico para sustituir a su actual coche de combustión interna. Tienen que reducir los tiempos de espera si no quieren que los clientes se vayan a otras marcas que ofrezcan productos similares a los suyos. Aumentar la demanda supondrá un esfuerzo que resultará en mayores ventas, entregas mucho más rápidas y clientes satisfechos con sus nuevos coches eléctricos.