Tesla está desarrollando baterías que durarán «al menos» 3.5 millones de kilómetros
4 min. lectura
Publicado: 19/10/2020 10:32
El equipo de investigación de Tesla comandado por Jeff Dahn, ha actualizado la información sobre sus trabajos con las nuevas generaciones de baterías. Un nuevo tipo de celda que permitirá disparar la vida útil de las baterías mucho más allá de las expectativas más optimistas hasta ahora.
En su última presentación, el equipo de Tesla ha mostrado unos trabajos en el laboratorio donde las nuevas celdas han pasado ya los casi tres años de prueba y 10.000 ciclos de carga y descarga, sin apenas notar nada de degradación en este tiempo. una Unos datos que abren la puerta a cifras de al menos 15.000 ciclos de carga y descarga, lo que supondría una vida útil de como mínimo 3.5 millones de kilómetros en un coche medio.
Y es que una de las partes más importantes de estos trabajos es que las celdas cuando se han mantenido dentro de una tasa de carga de entre el 25 y el 50% de su capacidad, estas han mostrado que incluso con el paso de decenas de miles de ciclos no sufrían apenas degradación. Algo que sobre el papel les permitiría seguir funcionando durante una cantidad de tiempo o de ciclos mucho mayor.
Pero incluso con una carga y descarga del 100%, el proceso donde se lleva la celda hasta su máxima capacidad y se descarga hasta el mínimo, y que no se recomienda por su impacto en su vida útil, vemos como en este escenario las celdas apenas pierden nada de capacidad después de los 15 mil ciclos y dos años y medio de pruebas. Sin duda el gráfico más impresionante de toda la presentación y que vemos en la imagen inferior.
La pregunta es si las baterías del «millón de millas» no eran ya suficientes para los coches. Y es que con un uso habitual estas superarían la vida útil del propio vehículo. La respuesta del equipo de Dahn es que con estos avances se abrirán nuevas posibilidades en apartados como el almacenamiento estacionario, baterías que hacen de respaldo de la red eléctrica, así como las aplicaciones como los coches conectados a la propia red, los sistemas V2G, donde hasta ahora Tesla había sido algo escéptico por culpa precisamente de la degradación de la constante carga y descarga.
También permitirá reducir el impacto ambiental de las propias baterías, que podrán seguir funcionando una vez que hayan terminado su uso en un vehículo y no tendrán que ser recicladas en muchos años. Unas baterías que podrán ser reutilizadas además de como respaldo de la red eléctrica, también podrán ayudar en la electrificación de otro tipo de vehículos, como barcos, trenes o aviones.
Unos trabajos en la mejora de la vida útil que se acompañan también en la constante búsqueda de la reducción de costes, que nos da un adelanto de como cambiarán las cosas en pocos años cuando dispongamos de baterías varios pasos por delante de las actuales, con más capacidad, mucha más vida útil, y unos precios más económicos gracias a la cada vez más fuerte economía de escala.