El gobierno de Australia «se está disparando en el pie» con las políticas de apoyo a los coches eléctricos

El ministro australiano al mando de la reducción de emisiones, Angus Taylor, ha descartado las políticas utilizadas en otros lugares para impulsar la adopción de vehículos eléctricos, como las ayudas directas a los consumidores o la prohibición de las ventas de coches nuevos de combustión a partir de 2030 o 2035. Estas medidas han sido ampliamente tomadas en países como el Reino Unido, Alemania, India, Tailandia o Japón.

Taylor afirma que la función del gobierno federal es permitir la elección del consumidor, ampliando la infraestructura de recarga de vehículos eléctricos, no impulsar un cambio rápido motivado por «asuntos climáticos.» Resalta también la duplicación de las ventas durante el año pasado de coches híbridos no enchufables.

El gobierno de Morrison ha acusado a los laboristas de querer «terminar durante el fin de semana»  una serie de medidas que impliquen un objetivo no vinculante del 50% de coches eléctricos para el año 2030. Además, desde el gobierno afirman que su papel no es cambiar esto rápidamente, sino garantizar la libre elección.

Durante 2020, tan solo el 0.75% de los coches nuevos comprados en Australia fueron completamente eléctricos. Como comparativa, aproximadamente más del 4% de las ventas a nivel mundial fueron EV, más del 10% en Reino Unido y en la Unión Europea y casi el 75% en Noruega.

Desde la semana pasada, los habitantes de Canberra que compren vehículos eléctricos y otros vehículos cero emisiones recibirán automáticamente dos años libres de cuotas municipales. El Territorio de la Capital Australiana ya exime de varios impuestos a los coches limpios y ha prometido a los hogares y organizaciones sin ánimo de lucro préstamos de hasta 15000 dólares al 0% para comprarlos.

También la semana pasada, el parlamento victoriano aprobó el primer peaje por uso en una carretera del país para vehículos eléctricos e híbridos. La medida propuesta por el gobierno fue respaldada por suficientes diputados mixtos, a pesar de la oposición de la Coalición y de los Verdes. Se hará efectiva a partir del día 1 de julio.

Según las nuevas leyes de Victoria, los propietarios de vehículos sostenibles deben realizar un registro de las lecturas del odómetro, que deberán proporcionar a las autoridades al final de cada año. Se cobrarán 2.5 centavos por kilómetro a vehículos eléctricos y de pila de combustible y 2 centavos a los híbridos. La tasa variará según el índice de precios al consumidor del momento.

Estos enfoques contrarios reflejan lo que los activistas dicen que es el enfoque confuso y contradictorio de Australia para ayudar al país a adoptar los vehículos eléctricos en un momento en el que otros países apuestan firmemente por ellos.

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Fuente | The Guardian