Lista con los 70 coches eléctricos, del más pesado al más ligero

Uno de los factores que determinan las características del coche eléctrico es su peso. Respecto a un vehículo tradicional con motor de combustión interna similar, un automóvil cero emisiones suele ser más pesado debido a los kg extras que aportan las baterías donde se almacena la energía eléctrica.

Para evaluar la situación real de cada modelo de coche eléctrico, gracias a los datos aportados por el YouTuber Bjørn Nyland, el portal especializado Insideevs ha realizado una elaborada clasificación donde se recopila la información del peso total de 70 coches eléctricos.

El modelo con más peso en su haber es el Mercedes EQV, una furgoneta premium eléctrica que roza las 3 toneladas. Por su parte el más ligero de la extensa lista es el Mitsubishi i-MiEV, un auténtico peso pluma en comparación con el resto de modelos que en la báscula «sólo» arroja 1.200 kg.

Un peso extra para no contaminar

Las baterías de los coches eléctricos suponen, hasta la fecha, un lastre que resta eficiencia al vehículo. Este es un mal necesario puesto que la batería aporta la energía que permite recorrer cientos de kilómetros sin emisiones para el medioambiente y las personas, .

El compromiso entre peso y capacidad de la batería es una de las batallas que se están librando por parte de los fabricantes, tanto de baterías como de automóviles, para conseguir un equilibrio entre kWh almacenados y kilogramos extras a mover en cada desplazamiento.

En general, el automóvil en las últimas décadas no ha parado de crecer tanto en tamaño medio como en peso. Los coches pequeños y ligeros son cosa del pasado, un efecto similar al experimentado en la Fórmula 1. Lejos quedan los años donde el concepto de monoplaza de poco más de 600 kg era la norma, para apostar por los actuales bólidos enormes y super-pesados comparados con sus predecesores.

El impacto del peso de las baterías

El coche eléctrico ha impulsado aún más esta tendencia de la industria automotriz debido al peso extra que aporta la batería. Afortunadamente, como esta generalmente se ubica entre el eje delantero y trasero en la zona más baja del vehículo, el peso adicional no repercute negativamente en la dinámica del automóvil.

De hecho, una de las características de los eléctricos es su buen dinamismo y comportamiento en carretera, gracias a que la mayor parte del peso está a escasos centímetros del suelo y las masa principal está muy centrada, eliminando disparidades de peso entre ambos ejes.

El peso tiene también una incidencia determinante en la eficiencia del automóvil, aunque no todo depende de la masa a mover en cada desplazamiento. No obstante, los kilos que el vehículo lleva a cuestas en cada viaje tienen su peso, nunca mejor dicho, sobre los consumos finales.

Aún así hay modelos que pese a su tamaño, volumen y peso, obtienen en las pruebas de consumo cifras excelentes gracias a los trabajos de ciertos fabricantes en la eficiencia de sus motores eléctricos, gestión del sistema incluyendo la frenada regenerativa, electrónica y la aerodinámica.