El Hyundai IONIQ eléctrico (28 kWh) puede recorrer 1.000 km en menos de 12 horas

Cuando Hyundai salió al mercado con el IONIQ lo hizo con tres modelos: híbrido, híbrido enchufable y eléctrico puro. Este último no destacaba precisamente por la capacidad de sus baterías, 28 kWh, pero le beneficiaba su aerodinámica y capacidad de recarga rápida frente a otras alternativas.

Bjørn Nyland lleva un ranking de coches eléctricos a los que somete a una misma prueba: recorrer 1.000 kilómetros en el menor tiempo posible, y eso incluye las recargas. Hará dos años, el IONIQ de 28 kWh consiguió recorrer los 1.000 kilómetros en 12 horas y 15 minutos.

La prueba se ha repetido en condiciones un poco más favorables de tráfico, temperatura y recarga, logrando reducir el tiempo en 20 minutos, hasta las 11 horas y 55 minutos. Es un resultado muy bueno para un coche con «tan poca capacidad» de baterías. De hecho, es de los mejores en esa categoría. Es más, aun mejor que el modelo que le sustituyó, que tiene 38 kWh de capacidad.

Tengamos en cuenta que el IONIQ eléctrico de 28 kWh tiene sus baterías refrigeradas por aire. Eso significa que la potencia de recarga se limita de forma automática cuando llegan los 50 ºC, para proteger las celdas de un sobrecalentamiento. De no ser por eso, el IONIQ eléctrico habría sacado un resultado todavía mejor.

Con un clima más frío, el IONIQ eléctrico de 38 kWh necesitó 14 horas y 20 minutos, ya que no pudo sacar toda la ventaja a la potencia de recarga ni a sus celdas. No olvidemos que las altas potencias solo son una ventaja en los primeros minutos, y según se van llenando las celdas y balanceando la potencia se desploma, y el último 20% cuesta mucho tiempo cargarlo. Sí, el tamaño importa.

Los 1.000 kilómetros se han hecho esta vez con nueve paradas, afinando un poco más se puede hacer en ocho paradas si se aprovecha más una de las mismas. Otro dato curioso, cuando se alcance el 5% de capacidad restante el coche entra en «modo tortuga», con las prestaciones muy limitadas, básicamente para poder llegar al siguiente cargador.

Así queda el particular ranking del señor Nyland, y el IONIQ de 28 kWh deja literalmente en ridículo a coches más modernos y con baterías del doble o casi triple de capacidad. Esto es como la fábula de la liebre y la tortuga, el que pasa por meta primero, gana, no el más rápido per se.

Las condiciones de la prueba fueron las siguientes: inicio al 100%, con una temperatura media de 21,5 ºC (14 a 28 ºC), a una velocidad media de 83,9 km/h y una eficiencia media de 171 Wh/km. Concretamente, la prueba se hizo el pasado 22 de julio.