Inducción: qué es y cómo se aplica en los coches
La inducción electromagnética es una tecnología que promete revolucionar la forma en que se carga la batería de los vehículos eléctricos. Esta permite la transmisión de energía eléctrica de forma inalámbrica, lo que ofrece una mayor comodidad y seguridad al usuario.
Además, esta tecnología también se está utilizando en la propulsión de motores eléctricos y en sistemas de frenado regenerativo, lo que demuestra el gran potencial de la inducción electromagnética en la industria automotriz.
En este artículo, exploraremos en profundidad la aplicación de la inducción electromagnética en los vehículos y cómo está transformando la forma en que nos movemos.
¿Qué es la inducción electromagnética?
La inducción electromagnética es un fenómeno físico en el que se produce una corriente eléctrica en un conductor debido a la variación de un campo magnético. Este fenómeno fue descubierto por el físico británico Michael Faraday en el siglo XIX.
La inducción electromagnética se basa en el principio de que un cambio en el flujo magnético que atraviesa un conductor produce una corriente eléctrica en el mismo. Esto significa que, si se mueve un imán cerca de un conductor, se produce una corriente eléctrica en el conductor.
De manera similar, si se hace pasar una corriente eléctrica a través de un conductor, se genera un campo magnético alrededor del mismo.
La inducción electromagnética tiene muchas aplicaciones en la vida cotidiana, como en la generación de energía eléctrica en centrales eléctricas, la carga inalámbrica de dispositivos móviles, la transmisión de datos inalámbrica y la resonancia magnética nuclear en medicina.
También es la base de los motores eléctricos y los generadores eléctricos, que son esenciales para la industria moderna y el transporte.
¿Cómo se aplica la inducción eléctrica en la industria automotriz?
La inducción electromagnética se aplica en la industria automotriz de varias formas. Una de las aplicaciones más comunes es en los motores eléctricos utilizados en vehículos eléctricos e híbridos. Los motores eléctricos utilizan la inducción electromagnética para convertir la energía eléctrica en movimiento mecánico.
En los vehículos híbridos, la inducción electromagnética se utiliza en los sistemas de frenado regenerativo, que convierten la energía cinética del vehículo en energía eléctrica que se almacena en la batería.
¿Se puede cargar una batería por inducción?
La inducción electromagnética también se utiliza en la carga inalámbrica de baterías. En este proceso, la energía eléctrica se transfiere sin necesidad de cables a través de la inducción electromagnética.
La carga inalámbrica funciona mediante la colocación de un dispositivo que necesita ser cargado, como un teléfono móvil o un reloj inteligente, sobre una plataforma de carga. La plataforma de carga contiene una bobina de cobre que genera un campo magnético de baja frecuencia.
La bobina del dispositivo a cargar se encuentra en resonancia con el campo magnético de la plataforma de carga, lo que genera una corriente eléctrica en la bobina del dispositivo y permite la carga de la batería.
La carga inalámbrica por inducción electromagnética es una forma cómoda y segura de cargar dispositivos, ya que no requiere la manipulación de cables y evita el riesgo de daños en los conectores de carga.
Además, puede utilizarse en diversos dispositivos, como vehículos eléctricos, drones y otros dispositivos que requieran carga de batería.
Carga por inducción en vehículos eléctricos
La carga por inducción electromagnética es una tecnología que también tiene un uso potencial en la carga de vehículos eléctricos. Esta tecnología se conoce como carga inalámbrica de vehículos eléctricos y funciona de manera similar a la carga inalámbrica de dispositivos móviles.
En la carga inalámbrica de vehículos eléctricos, una placa de carga se instala en el suelo y una bobina de carga se coloca en el vehículo. Cuando el vehículo queda estacionado sobre la placa de carga, se establece un campo electromagnético que permite la transmisión de energía eléctrica de la placa al vehículo.
La carga inalámbrica de vehículos eléctricos ofrece varias ventajas, como la eliminación de los riesgos asociados con los cables de carga, la comodidad de la carga automática y la posibilidad de carga durante el estacionamiento en lugares públicos, como estacionamientos o calles.
Sin embargo, aún se encuentra en fase de desarrollo y no se ha generalizado su uso en la carga de vehículos eléctricos debido a su coste y a las limitaciones en la eficiencia de la carga.