Tesla quiere aumentar el beneficio por coche antes de incrementar la producción
Uno de los aspectos que más nos ha llamado la atención respecto a la presentación esta semana de los datos económicos de Tesla, es que durante el primer cuarto de año esperan por fin lograr entrar en beneficios con la venta de sus coches.
Pero para lograr estos beneficios según Elon Musk, presidente y fundador de la compañía, es necesario ajustar los costes de fabricación, unos ajustes centrados principalmente en el coste de la mano de obra que en una primera fase ha necesitado hasta 68 horas semanales para lograr sacar los vehículos de la fábrica, y donde Musk piensa que se puede mejorar para lograr alcanzar una cifra de beneficio de nada menos que el 25% por vehículo.
De esa manera Tesla podrá aumentar su producción más allá de las 400 unidades semanales para alcanzar las 500 unidades, lo que le permitiría sacar en este 2013 unas 24.000 unidades del Model S y disparar los ingresos hasta una cifra cercana a los 2.000 millones de dólares. Pero como decimos, la gran barrera en estos momentos es el elevado coste de la mano de obra, un coste que Musk espera rebajar de las 68 horas semanales actuales por trabajador hasta unas 50 horas semanales, lo que supondrá un incremento del margen por vehículo que permita a Tesla aumentar de forma significativa sus ingresos.
Pero no es este el único reto de Tesla, y otro de los frentes que tiene abierto es el de los costes de los componentes, que como es normal al ser una empresa que trabaja con un volumen relativamente bajo el coste de estos componentes suele ser algo más elevado que los que logran los grandes fabricantes, y de esa manera no es lo mismo trabajar con 1.500 unidades al año que con 24.000 unidades.
Uno de los ejemplos de lo mucho que tiene que mejorar Tesla en cuanto a suministradores es el caso de las llantas, y más concretamente las llantas de 21 pulgadas opcionales que están tardando más de lo esperado y que ha obligado a Tesla a entregar varias unidades con llantas de 19 pulgadas, con la promesa de cambiárselas al propietario cuando tengan en stock las de 21.
Finalmente Tesla ha decidido por buscar nuevos proveedores para las llantas llegando a importarlas desde la República Checa, una decisión tomada con algo de retraso y que ha motivado la frustración personal de Elon Musk que ha resumido esta situación con una frase muy gráfica «Quería darme un puñetazo en la cara por esta cuestión«
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Fuente | Autobloggreen
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