Gogoro, así se llama el scooter eléctrico diseñado por antiguos ingenieros y diseñadores de HTC. Este proyecto ha sido capaz de captar 150 millones dólares en los últimos tres años, una cifra muy buena para tratarse de un scooter eléctrico. Pero este gran apoyo no es casualidad, ya que lo que ofrece la scooter Gogoro es realmente atractivo.
Tiene un motor de 6.4 kW (8.7 CV) gracias al cual puede alcanzar una velocidad máxima de 95 km/h, y hacer el 0-50 km/h en 4.2 segundos. Pero lo especial de esta scooter reside en su batería. La Gogoro cuenta con dos baterías extraíbles gracias a las cuales puede recorrer 100 kilómetros con una sola carga.
La ha abierto en Taipei un centro de exposición en el que se puede conocer a la Gogoro más a fondo. La Gogoro es una scooter muy personalizable que tiene la posibilidad de cambiar la parte delantera por otras con diferentes colores llamativos. Esto podría hacerla atractiva para el público joven.
Además es una moto muy práctica. Aparte de sus dos baterías extraíbles, tiene espacio suficiente para guardar un casco integral. Un adaptador Bluetooth para el móvil actúa como llave para abrir la scootery para ponerla en marcha basta con pulsar el botón GO que tiene en el medio.
Los clientes potenciales pueden probar las unidades de demostración alrededor del centro o pedir una prueba para darse una vuelta por las calles de Taipei. De esta manera la marca espera que la buena experiencia de conducción consiga atraer compradores.
Pero esta moto no hay que enchufarla como una moto convencional. Sus baterías están preparadas para ser extraídas y cambiadas en una estación de cambio de baterías de la propia Gogoro. Estas estaciones estarán situadas en las ciudades en las que Gogoro opere. Al dejar tu batería descargada, automáticamente la estación te proporcionaría otra con carga completa.
Todo esto irá acompañado de una aplicación móvil que te dará información acerca de tus recorridos y de la situación de la estación de carga más cercana. Sin duda, estamos ante lo que sería una «SmartScooter».
La verdad es que el proyecto tiene buena pinta, aunque también varios peros. Probablemente el coste del servicio del intercambio de baterías será bastante alto. Además Gogoro tendrá que hacer una gran inversión en este tipo de estaciones. Además la scooter no da la posibilidad de poder cargarla en casa. Lo que si le veo más futuro es como un servicio de «moto sharing» para las grandes ciudades.
Fuente | Theverge
