Hevo Power desarrolla un punto de recarga inalámbrica con forma de alcantarilla

Hevo Power desarrolla un punto de recarga inalámbrica con forma de alcantarilla

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Publicado: 17/10/2013 16:00

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La recarga inalámbrica es uno de los nichos de mercado con mayor potencial de futuro, una alternativa a la recarga por cable que aumentará nuestra comodidad y reducirá el riesgo de sufrir un acto de vandalismo contra la instalación.

Al contrario de lo que podríamos pensar, no se trata de una tecnología a años vista y uno de los ejemplos nos llega desde Nueva York, donde el próximo año comenzará la instalación de un punto de recarga inalámbrica que llegará de la mano de Hevo Power, y que tendrán la peculiaridad de integrarse perfectamente en el entorno urbano por su forma de tapa de alcantarilla.

 

hevo power recarga inalambrica

Este emisor simplemente deberá ser integrado en el pavimento y estará listo para ofrecer recargas inalámabricas a los coches eléctricos que cuenten con compatibilidad con este formato, tal vez el principal problema al que se enfrenta esta tecnología que necesitará que los fabricantes se decidan por añadir este elemento en sus coches, y además que se pongan de acuerdo en un formato conjunto.

Un punto de recarga inalámbrica con forma de tapa de alcantarilla para una mejor integración con el ambiente
El sistema de Heco cuenta con una salida de 220 voltios y capacidad para entregar de 10 kW de potencia de salida, una cifra que según sus diseñadores podría superar sin problemas, pero que de momento para el programa de pruebas y el tipo de uso al que será dirigido parece una cantidad más que suficiente, una afirmación que deja las puertas abiertas a mayores potencias que permitan recargas rápidas sin necesidad de bajar del coche.

 

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Lo que está claro es que la evolución hará que los cables desaparezcan de nuestras vidas, incluyendo los cables que utilizamos para la recarga de las baterías, un momento que necesitará unos cuantos años durante los cuales este formato tendrá que mejorar en su eficiencia para acercarse en la medida de lo posible a las tasas que nos ofrece el cable, y también en costes.

Vía | Wired