¿Tiene sentido un Dacia eléctrico?
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Publicado: 03/10/2013 07:00
Hace unos días el presidente de Renault, Carlos Ghosn, aseguraba que estaban preparando la expansión de su tecnología eléctrica por todas sus marcas, incluyendo Dacia, el low cost de Renault, que se beneficiaría de las sinergias creadas dentro del grupo franco-japonés.
Pero el problema es que low cost y eléctrico no parecen dos palabras que en esta primera fase se entiendan demasiado bien, y es que el elevado coste de las baterías y demás elementos que forman el sistema de propulsión de un coche eléctrico, hacen imposible mantener ni de lejos los actuales precios de Dacia, algo que tendrá como consecuencia coches low cost, pero precios premium, algo que nos hace preguntarnos si tendría sentido ahora mismo este movimiento.
De momento por supuesto no hay cifras ni detalles técnicos, pero podemos hacer un ejercicio de imaginación pensando en la electricifación de un Dacia Duster, un modelo que está disponible en España desde 10.900 euros y que una vez instalado un sistema como el del LEAF, estamos seguros no bajaría de 25.000 euros antes de ayudas.
Este teórico escenario supondría que este modelo básico en todos sus aspectos, precio, equipamiento y acabados, sea apenas 5.000 euros más económico que el LEAF Visia, una diferencia no demasiado elevada que estamos seguros la mayoría de los compradores estarán dispuestos a afrontar dada la diferencia de calidad entre ambos modelos.
Otra cosa muy diferente sería si Renault se decidiese por lanzar un Dacia Sandero, pero en lugar de instalarse el sistema del LEAF, le proporcionase uno más sencillo, con una batería de unos 16 kWh y un motor menos potente, una combinación que le permitiese hacer al menos 100 kilómetros reales. Gracias a esta rebaja, el precio de 8.300 euros de la versión gasolina podría verse incrementado hasta los 16.000 euros de la eléctrica, una cifra que sobre el papel parece irresistible, pero que no olvidemos pagaremos por un coche extremadamente sencillo a nivel de equipamiento y calidades interiores.
Por lo tanto aunque a primera vista electrificar Dacia parece una buena idea, el problema será a la hora de vender coches tan sencillos con precios muy por encima de los habituales en su segmento, ya que mientras que el LEAF compite contra los Golf y compañía, los Dacia deben hacerlo contra Citroën, SEAT o KIA, entre otros, un nicho donde se mira cada euro y donde un Dacia eléctrico tendría todas las de perder.