Feliz tercer cumpleaños Renault Twizy

Parece que fue ayer, pero el más pequeño de la gama ZE de Renault ya ha cumplido tres años en el mercado.

El Renault Twizy cumple tres años en los que ha vivido una montaña rusa de emociones, con un arranque muy prometedor, pero que se ha desinflado con el paso del tiempo. El año de su llegada llegó a colocar 9.000 unidades, principalmente entre la red de concesionarios. Pero un año después la cifra cayó hasta las 3.000 unidades, y el pasado año ha vuelto a bajas hasta las 2.000 unidades.

Las razones de esto son varias. La primera tal vez el sistema de alquiler de batería cómo única opción comercial. Algo que le resta parte del atractivo entre la gente que lo quiere comprar como tercer vehículo de casa, y que no acaba de entender lo del alquiler y la limitación de kilómetros.

La segunda es lanzar el Twizy sin ventanas aunque fuese en forma de accesorio, como lo eran las puertas. Renault se equivocó al lanzar el Twizy sin ninguna opción para cerrar el habitáculo, algo que le valió al pequeño ganarse una mala fama que el lanzamiento posterior de la solución de Renault ya no pudo solucionar.

La tercera era que incluso con alquiler de batería, el precio del Twizy era bastante elevado. Los «desde» 7.220 euros, antes de ayudas, que cuesta la versión 45 son un buen pico. Una cifra que crece hasta los 7.930 euros de la versión 80. A  estos hay que añadir los 590 euros de las puertas, y los 350 euros de las ventanas de Renault. Mucho dinero.

Ahora queda por ver la evolución en un 2015 donde la cosa tampoco pinta bien para un modelo que de seguir esta dinámica, en dos años no venderá ninguna unidad.

Una mala noticia ya que no olvidemos que este cuadriciclo se fabrica en España, en la planta de Valladolid, y podría suponer una buena alternativa de movilidad en las ciudades y para los sistemas de car sharing, pero Renault debe mover ficha y actualizar su oferta.