Hace unas horas Elon Musk ha colgado un Tweet donde indicaba el duro trabajo que estaban realizando en la Gigafábrica de baterías de Nevada. Unas declaraciones que llegan después de unas semanas donde se ha indicado que había cuellos de botella en la producción del Model 3, y que todos daban por sentado que estos problemas estaban localizados en la fábrica de Fremont. Pero parece que esto no era del todo correcto.
Un infierno de producción que parece se ha extendido también a la Gigafábrica de baterías. Algo que ha alimentado los rumores por una reciente visita de los representantes de Tesla a Corea del Sur, donde se han reunido con Samsung y LG.
De momento desde el fabricante norteamericano no se ha indicado la naturaleza de este encuentro. Pero los problemas para escalar la producción en la planta de Nevada, y ahora las noticias de estos encuentros han hecho saltar todas las alarmas, y los rumores.
La cuestión es que Tesla ya tiene una relación comercial con Samsung, que se encarga de producir las celdas que llevan sus sistemas de almacenamiento estacionario. Las Powerwall y Powerpack. Pero con la división de baterías de LG hasta ahora no se conocían tratos (si con LG Electronics que se encarga de algunas partes del Model 3) y aquí es donde han aparecido las especulaciones.
Según informa el diario coreano Korea Herald, el pasado mes de octubre Tesla se ha reunido con Samsung SDI y LG Chem, para discutir aspectos relacionados con la producción de baterías. Un movimiento que permitiría desbloquear el cuello de botella en la producción de baterías para el Model 3, al menos hasta que la producción de la planta de Nevada coja ritmo.
El diario indica que Tesla ha preguntado a Samsung y LG sobre sus diseños de celdas cilíndricas aplicadas en coches eléctricos. Sus especificaciones, su control de calidad.
Desde Tesla no se ha comentado este encuentro, pero sin duda incluso sin problemas de producción en la Gigafábrica, la demanda de baterías no para de crecer, y obligará al fabricante de Palo Alto a buscar alternativas. O abrir nuevas instalaciones de producción, o acudir a suministradores externos.
No olvidemos que para la fecha de su finalización, 2020, la Gigafábrica tendrá capacidad para unos 500.000 packs al año. Una cifra que será ocupada casi en su totalidad con la demanda del Model 3, a la que se sumará el Model Y. Además están las baterías para los Model S y X, y también para los futuros proyectos, como el camión eléctrico.
La primera opción, levantar una nueva fábrica, es una alternativa a más largo plazo, y que de momento se enfrentaría a los mismos problemas que la actual instalación. Además de añadir más tensión a la tesorería de Tesla. Es por eso que a corto y medio plazo parecería más lógico reforzar el suministro con empresas externas, tal como han hecho con las celdas destinadas a las baterías para el hogar.
Otra opción que se rumorea es que LG y Samsung simplemente actúen como soporte técnico para acelerar la producción de la Gigafábrica de Tesla. Y es que no podemos olvidar que la propia LG está sobrepasada en la demanda de sus muchos clientes en todo el mundo, por lo que añadir a Tesla aumentaría la presión en sus instalaciones.
Algo que dejaría el acuerdo en un intercambio tecnológico y de conocimiento, que beneficiaría a todas las partes de cara a aumentar su producción de la forma más eficiente posible.
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Vía | Korea Herald
