Toma de contacto con la Bultaco Albero. Una bici-moto que combina movilidad y flexibilidad
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Publicado: 15/12/2017 11:00
Esta pasada semana hemos tenido la oportunidad de acercarnos a Málaga a realizar una prueba de la nueva Bultaco Albero. Una nueva propuesta del fabricante español que incrementa su oferta con un modelo homologado como ciclomotor, pero con el que nos podremos mover pedaleando. Un concepto que nos recuerda ligeramente a la mítica Vespino, pero con un sistema de propulsión eléctrico, y con un diseño y cuerpo más cercano a una bicicleta.
Por desgracia lo que sería una prueba en condiciones se ha convertido en una simple toma de contacto. La culpa ha sido una lluvia que nos ha impedido recorrer los kilómetros que nos habría gustado. Una por momentos intensa lluvia que incluso ha provocado que uno de los miembros del grupo se haya caído de su moto, lo que nos ha hecho cancelar la ruta.
Pero durante los 23 kilómetros que ha durado esta toma de contacto, hemos podido descubrir la idea que hay detrás de este original concepto. Un modelo que a pesar de contar con pedales, y poder moverte con ellos, es un ciclomotor, lo que nos obliga a contar con un permiso de conducir, seguro, impuesto de circulación, y claro, casco.
Bultaco Albero: motor
Las características de la Albero ya las conocemos, o las podemos ver en la web. Cuenta con un motor de 2 kW y 60 Nm de par situado en la rueda trasera. Un propulsor fabricado en China que es re-ensamblado en la fábrica de Bultaco y donde se le pasa un nuevo control de calidad. Este es capaz de impulsarnos hasta una velocidad limitada por su homologación a 45 km/h. Aunque en las pruebas hemos podido llegar a los 50 km/h en el marcador, y superarlos si ayudamos con el pedaleo.
Para su uso podremos seleccionar tres tipos de apoyo, cada uno con más potencia. Uno básico que nos ofrece en torno a los 800W, y que sirve sobre todo para movernos por zonas urbanas o resbaladizas con un mejor control. Luego tenemos un modo intermedio, y el modo Sport, que nos ofrece la potencia completa.
La diferencia principal además de la entrega de potencia, es también su impacto en la autonomía. Aunque luego lo volveremos a tratar, según Bultaco la Albero logrará entre 100 kilómetros de autonomía en el modo ECO, 75 kms con el modo Tour, y 50 kilómetros en el Sport.
El rendimiento del motor es excelente, principalmente gracias a sus 60 Nm de par. Esto nos ha permitido por ejemplo subir sin problemas hasta el castillo de Gibralfaro, en un recorrido que parte desde casi el nivel del mar y llega en pocos kilómetros a los 130 metros de altitud. Una subida con rampas por momento extremadamente pronunciadas que hemos podido subir sin esfuerzo.
Otro de los aspectos más originales de este modelo es su sistema de pedaleo. Además del convencional, con su cambio de 9 velocidades, cuenta con un desmultiplicador con un ratio 1: 1,65. Esto quiere decir que una vez activado, cada vuelta del pedaleo equivalen a 1.65 vueltas. Algo que por ejemplo nos permite apoyar con nuestro esfuerzo incluso a alta velocidad sin el efecto «lavadora» de un sistema sin «overdrive».
Bultaco Albero: batería
Sin duda una de las protagonistas de esta configuración. Una batería que dispone de una capacidad de 1.3 kWh a 58.8V formada por celdas 18650 de Samsung. Toda una garantía de rendimiento y durabilidad. Un pack extraible que podremos subir a casa o a la oficina para cargar, y que necesita 3 horas para llegar al 95% de carga mediante un cargador de 465 W.
Según Bultaco, la batería mantendrá un 80% de capacidad después de 1.000 ciclos de uso. Algo que nos indica que después de unos 75.000 kilómetros, habremos perdido apenas el 20% de la capacidad de carga. Por supuesto, una cifra que dependerá de factores como el nivel de cuidado que tengamos sobre todo con las descargas profundas de la misma.
Este es un ejemplo del concepto de la Albero, que nos propone un concepto similar a la Vespino, pero además de eléctrica (o híbrida si tenemos en cuenta la tracción animal) nos permite poder recargar en casa o en el trabajo. Eso si, debemos tener en cuenta los 8 kilos que pesa esta batería.
Bultaco Albero: Sensaciones de conducción y autonomía
Lo primero que llama la atención de la Albero es que a pesar de ser un ciclomotor, podemos conducirla como una bici. Sobre todo sobre llano. Algo que facilita que pase más desapercibida en zonas donde un ciclomotor podría ser mal visto, o incluso podremos llevarla caminando a nuestro lado por donde las motos tienen prohibido el acceso.
Es una bici pesada. Los 42 kilos se notan cuando queremos subir alguna pendiente, lo que nos obliga a esforzarnos. Pero es posible lo que nos dice que incluso aunque nos quedemos sin batería, podremos llegar a nuestro destino. Eso si, de una forma más física y más lenta que usando el motor eléctrico.
La posición de conducción es también muy de bici. El sillín se sitúa a la altura del manillar, por lo que no iremos tan cómodos como en una moto. Pero una vez subidos esa sensación se reduce algo.
La prueba de autonomía no ha podido ser completa por culpa del mal tiempo. Un frente lluvioso nos ha barrido durante todo el día, y a pesar de los intentos, finalmente hemos tenido que desistir. Una mala suerte para nosotros, ya que a pesar de las nubes el resto de días de las pruebas han discurrido sin apenas lluvia. Pero este día ha caído la del pulpo, incluso para alguien como yo acostumbrado a las lluvias de Galicia.
En total hasta la parada de la prueba hemos recorrido 23 kilómetros, y consumido dos de las ocho barras del contador de la batería. Un recorrido que hemos realizado intercalando los diferentes modos, usando el modo ECO por el centro histórico de Málaga por lo resbaladizo de la loseta y la presencia de peatones. Un recorrido que también ha tenido como protagonista la subida al monte de Gibralfaro. Esto nos indica que las cifras de autonomía oficiales se acercan mucho a la realidad, con una estimación de 90 kilómetros de continuar con nuestra prueba hasta el final.
Bultaco Albero: Cosas a mejorar y conclusión
Entre los aspectos a mejorar de la Albero podríamos incluir aspectos como el espejo retrovisor, que es muy atractivo a nivel de diseño, pero algo pequeño de tamaño. Esto nos obliga a mover un poco el brazo izquierdo para poder ver lo que llevamos detrás. También echamos en falta un sistema de intermitentes.
Por supuesto el punto más flojo de la Albero es su precio. Un producto que se sitúa en un escalafón bastante exclusivo por los 5.700 euros que sale después de impuestos. Un precio que además no podremos reducir con las ayudas públicas, ya que estas contemplan incentivos sólo a las motos con potencia a partir de 3 kW.
La conclusión es que la Bultaco Albero puede encontrar su hueco principalmente en el mercado europeo, donde su polivalencia e imagen diferente le pueden ayudar a llegar a un cliente dispuesto a desembolsar algo más por este tipo de productos. Y es que con la Albero hemos podido disfrutar de las características de un ciclomotor eléctrico, pero con la libertad y flexibilidad de una bicicleta eléctrica.
Por ejemplo, en Málaga con el permiso del ayuntamiento, hemos podido movernos por el centro histórico sin molestar ni llamar la atención de la gente, más allá de la curiosidad por ver por la calle de nuevo a la marca Bultaco. Y es que cada parada para tomar una foto, nos asaltaba un grupo de personas para preguntarnos sobre la moto.
Un modelo que pueden encajar también entre los que busquen una bicicleta que les permita moverse sin pedalear de forma legal, y que al mismo tiempo no ocupe tanto espacio como una moto. Una Albero que incluso alguno de los asistentes ha logrado subir a su habitación del hotel en el ascensor. Algo imposible con una moto eléctrica convencional.
Lo mejor:
Diseño
Eficiencia
Flexibilidad
Lo peor:
Precio
Integración de la batería
Retrovisor e intermitente