Para Renault, la llegada de nuevos competidores será bueno para el mercado del coche eléctrico

El nuevo jefe del programa de coches eléctricos en Renault, Gilles Normand, ha realizado una entrevista en la que hace un repaso al presente y el futuro del sector. Un escenario optimista gracias en parte a la incorporación de grandes marcas hasta ahora poco activas.

Antes de nada el Sr Normand reconoce que el desarrollo del sector ha sido más lento de lo esperado. El grupo Renault-Nissan se había puesto como objetivo llegar a las 1.5 millones de unidades vendidas a finales de 2016. Pero la realidad ha sido mucho más modesta, con 424.797 entregas entre las dos marcas.

A pesar de esto desde el fabricante francés son optimistas gracias a que la inversión en I+D e infraestructura de recarga ha continuado siendo robusta.

Una inversión que no para de crecer gracias a la incorporación de nuevos fabricantes. Para Renault, cuantas más marcas se sumen al tren, mayor será el capital destinado, y más suministradores se sumarán a la tendencia. Una economía de escala que beneficiará a todas las marcas.

También indica que la tecnología está logrando alcanzar un punto de inflexión. Las actuales autonomías supondrán un impulso importante entre los clientes menos entusiastas. Modelos como el propio Renault ZOE, con sus 403 kilómetros NEDC, o el Opel Ampera-e, con 520 kilómetros. Y todo con unos precios antes de ayudas de entre 30 y 40 mil euros.

Pero para Renault es importante también la llegada de grupos como Volkswagen. Gracias a esto, y a la expansión de las propuestas entre marcas como Skoda o SEAT, permitirá añadir un importante volumen de producción, sobre todo a componentes tan importantes y costosos como las baterías.

Para el Sr Normand, hay tres cuestiones claves que acelerarán todavía más el desarrollo del mercado del coche eléctrico:

• Una autonomía real lo más cercana posible a los modelos de combustión interna

• Restricciones de circulación a los modelos diésel en las grandes ciudades

• Los estudios indican que el 40% de los compradores están considerando adquirir un coche eléctrico. Hace cinco años apenas era el 10%

Un ejemplo de esto lo podemos encontrar en el propio Renault ZOE. La nueva versión dotada de una batería de 41 kWh, y una autonomía real de unos 300 kilómetros, se ha convertido en un éxito desde su lanzamiento, y en los tres meses que lleva en el mercado ha recibido 15.000 pedidos.

Industriales eléctricos, y no al hidrógeno

Renault también está apostando fuerte por el segmento de los industriales eléctricos. Es por eso que a mediados de este año lanzarán la nueva versión de la Renault Kangoo ZE, con su batería LG de 33 kWh, y una autonomía real de unos 200 kilómetros. A finales de año llegará la nueva Renault Master ZE, que añadirá tamaño al segmento, con la misma batería en su interior.

Preguntado por la cuestión del hidrógeno, Renault se suma a los fabricantes que han decidido no seguir desarrollando su proyecto. De esta forma el grupo francés sigue los pasos de Daimler, que también ha confirmado que centrará su apuesta en los coches eléctricos a batería.

Normand indica que en 10, 20 o 30 años las pilas de combustible podrían tener su sitio, pero ahora la realidad son las baterías, y es donde centrarán sus recursos.

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Vía | Autonews