El éxito del coche eléctrico en Noruega comienza a pasar factura a la demanda de petróleo

El éxito del coche eléctrico en Noruega comienza a pasar factura a la demanda de petróleo

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Publicado: 28/05/2018 16:26

Después de décadas de crecimiento continuo, el pasado año 2017 por primera vez disminuyó la demanda de combustible en Noruega. Esto se debe a que actualmente los coches eléctricos y los híbridos enchufables ya copan alrededor de un 40% de las ventas de coches nuevos en Noruega, gracias a los subsidios e incentivos.

A partir del año 2025, el gobierno noruego quiere que sólo se vendan coches eléctricos en su mercado. Solo quedan siete años para entonces. En caso de que se logre conseguir dicho objetivo, cabe preguntarse cómo afectará a la industria petrolífera o si la red eléctrica del país podrá soportar la demanda.

Noruega es un importante productor de petróleo. Sin embargo, lo reducido de su población, la conciencia medioambiental del gobierno y su gran apuesta por la energía hidroeléctrica permiten al país nórdico una huella de carbono muy reducida si la comparamos con otros países europeos.

A pesar de todo, la producción de petróleo de Noruega está en aumento. Después de cierta disminución durante la primera década de los 2000, dicha industria se ha recuperado, y los planes de Noruega pasan por mantener este crecimiento, pues las exportaciones de petróleo suponen el 15% del PIB del país nórdico. Aunque esta cifra no es tan alta como la que se da en países dependientes del petróleo para sostener su economía, sigue siendo lo suficientemente importante como para mantener una producción alta.

El consumo interno de petróleo también creció de forma estable en Noruega desde el año 2009 hasta 2016. A pesar de la ligera caída en la demanda de petróleo (es decir, en la demanda de combustibles), parece claro que Noruega sigue apostando por su extracción. Cabría preguntarse si el país, que de puertas para afuera ofrece una imagen ecologista y comprometida con el medio ambiente, tiene planes para ir abandonando la industria petrolífera de forma paulatina, sustituyéndola por otras iniciativas que fortalezcan la economía del país sin depender del gas y el petróleo.

Fuente | OilPrice