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Opinión. ¿Cuántos coches eléctricos se vendería en España con el modelo de Noruega?

En la actualidad las ventas de coches eléctricos en España no pasan de una anécdota en el global de matriculaciones. Podemos repasar unas cifras para hacernos una idea.Por ejemplo, en 2017 se han vendido en nuestro país un total de 3.920 coches eléctricos, y 3.528 híbridos enchufables. En total entre las dos tecnologías se han alcanzado las 7.448 unidades.

Esto supone que entre eléctricos España ha logrado una cuota de penetración de apenas el 0.6%. Una cifra cuando menos ridícula.

Podemos comparar estas cifras con el líder en implantación de coches eléctricos de Europa. Noruega. En 2017, se registraron 33.080 coches eléctricos puros, lo que representa el 20.9% del total de ventas. Por su parte los híbridos enchufables han cerrado el año con 29.236 unidades matriculadas, lo que representa un 24.7% del total de ventas. Esto significa que entre ambas tecnologías se han llevado el 45.6% del mercado noruego.

Por supuesto podemos pensar que el mercado noruego es mucho más pequeño, algo que es cierto. Mientras que en España en 2017 se han vendido 1.2 millones de coches, en Noruega la cifra ha llegado a las 158.000 unidades. Pero si hacemos un sencillo cálculo, vemos que Noruega ha vendido 8 veces más coches eléctricos que España. La conclusión es clara.

Pero la pregunta es cuáles son las diferencias entre estos dos mercados para esa disparidad en cuanto a matriculaciones. La respuesta más fácil es que cuentan con un mayor nivel económico, que hace más sencilla la inversión en un eléctrico. Pero la cuestión es bastante más amplia.

Además de contar con mucha más renta, en Noruega los coches eléctricos son mucho más baratos que en España. Por ejemplo, un BMW i3 parte en ese mercado desde los 30.850 euros al cambio, mientras que en España los precios arrancan en los 38.200 euros. Por lo tanto un mercado donde la gente gana mucho más, tiene a su disposición coches más económicos. La explicación es la exención de IVA para estos vehículos. Un formato extremadamente eficaz que evita a los concesionarios tener que lidiar con engorrosos trámites, y a los clientes tener que pelear con hacienda a al hora de declarar las ayudas que existen en España.

Y es que en España el formato es radicalmente diferente. Aquí hay un programa de ayudas ridículamente dotado. 16.6 millones de euros a repartir entre las denominadas tecnologías alternativas, incluyendo los contaminantes vehículos a gas. Una cifra que suele terminarse en pocas horas. El resultado es mucha gente que se queda sin ayuda, y que decide paralizar la compra de su coche, o directamente cancelarla.

Pero incluso los agraciados con esa subvención deben luego afrontar el proceso de contabilizar esa ayuda en la declaración de la renta. Una cantidad que imputa como ingreso, y del que tendrán que devolver un porcentaje según su situación.

Pero no pensemos que le éxito de Noruega se basa sólo en la exención del IVA. Además los eléctricos disfrutan de una amplia red de recarga, que se ha expandido precisamente gracias a la fuerte implantación. Algo que ha animado una inversión privada que ha llegado justo después de la pública. Luego hay otras ayudas menores, pero importantes, como el poder aparcar en el centro de las ciudades, poder moverse por los carriles especiales..y un largo etc.

El modelo noruego para España

La pregunta que nos hacemos entonces es cuántos coches se venderían si España aplicase un sistema similar al noruego, con un IVA reducido que cumpla con la normativa europea, que limita las exenciones como la de Noruega. Es complicado llegar a un número, pero seguro que muchas más que las 7.448 unidades del pasado año.

Con ofertas como el Renault ZOE con 41 kWh con un coste por debajo de 25.000 euros con batería en propiedad, un Hyundai IONIQ por unos 18.900 euros (aplicando la actual oferta de la marca) o un BMW i3 por unos 30.000 euros, sin duda los números encajarían mucho mejor para un cada vez más amplio abanico de compradores.

Si tenemos en cuenta que en 2017 la media de compra de un coche nuevo en España se ha situado en los 17.155 euros, podemos pensar que con un IVA reducido las cifras de los coches eléctricos se acercarían bastante a la media. Incluso encajaría dentro del presupuesto de un amplio abanico de usuarios. Según las estadísticas, el pasado año los compradores con edades comprendidas entre los 35 y 44 años han realizado un gasto medio de 20.652 euros en su coche nuevo.

Además con este formato se eliminaría el temor de muchos usuarios que no se deciden a afrontar el proceso de compra desanimados por el propio programa de ayudas del gobierno. Algo que debería llevar las cifras de España a números similares a mercados como el de Francia, que ha cerrado el pasado 2017 con 36.000 coches eléctricos e híbridos enchufables vendidos.

Esto supondría que nuestro país lograse llegar a a corto plazo a un 3% de cuota de mercado entre eléctricos puros e híbridos enchufables. Un número más acorde con un mercado como el nuestro y no el ridículo 0.8% logrado entre ambas tecnologías el pasado año.

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