Tesla acaba de demandar a un antiguo empleado que presuntamente robó varios gigas de datos confidenciales de la empresa, los cuales luego envió a agente externos. De acuerdo con Tesla, por el momento sólo han descubierto algunas de todas las actividades ilegales realizadas por su ex empleado, el técnico Martin Tripp. La demanda presentada en Nevada dice que Tripp «admitió haber reescrito el software que hackeó el sistema operativo de fabricación de Tesla, y que transfirió varios gigabytes de datos de Tesla a entidades externas».
Los datos incluyen «docenas de fotografías confidenciales y un vídeo de los sistemas de fabricación de Tesla». Además de todo ello, Tesla añade que Tripp escribió un código para exportar periódicamente los datos de Tesla a personas ajenas a la empresa. Por último, la demanda alega que Tripp hizo declaraciones falsas a los medios.
«Por ejemplo, Tripp afirmó que se habían usado celdas de batería perforadas en ciertas unidades del Model 3, aunque no se utilizaron dichas celdas en vehículos, baterías o cualquier otro pack. Tripp también exageró enormemente la cantidad real y el valor del material desechado que Tesla genera durante el proceso de fabricación, y afirmó falsamente que Tesla se retrasó en la puesta en marcha de los nuevos equipos de fabricación».
Tesla dice en la demanda que Tripp se había quejado de que no se le hubiera dado un cargo más importante en la compañía californiana, y que era combativo y perturbador con sus compañeros de trabajo. La demanda alega que Tripp llevó a cabo sus acciones en represalia por ser reasignado a un nuevo puesto de trabajo dentro de Tesla. La compañía se ha negado a hacer comentarios sobre la demanda, mientras que Tripp no ha podido ser localizado por los medios.
Esta demanda se produce apenas un día después de que los medios informaran de que Elon Musk había enviado un correo electrónico a los empleados de Tesla, advirtiendo de que un trabajador había llevado a cabo un sabotaje extenso en las instalaciones de la compañía. Ya está confirmado que dicho empleado es el mismo sobre el que pesa la demanda de Tesla.
Parece complicado que se llegue a conocer quienes eran los receptores de la información robada de Tesla, sin embargo, Elon Musk comentó en su mail que sospechaba de la industria petrolífera, así como de otros fabricantes de automóviles: «si falsean sus emisiones, no veo por qué no harían trampas de otras maneras».
Fuente | CNBC
