El Volkswagen Beetle, conocido como Escarabajo en nuestro país, fue el primer modelo jamás construido por la marca alemana. El pequeño modelo, probablemente el más famoso del mundo, se fabricó durante un total de 65 años, desde 1938 hasta 2003. Además, continúa siendo el coche más vendido de la historia, con 21,5 millones de unidades (otros modelos, como el Honda Civic, han vendido más, pero a lo largo de numerosas generaciones totalmente diferentes entre sí).
En 1998, cuando el Beetle original se seguía fabricando en México, Volkswagen lanzó el New Beetle. Una reinterpretación de su icónico clásico basada en la plataforma del Golf IV. En 2012, fue lanzada al mercado la segunda generación del Beetle moderno, esta vez basada en el Golf VI. Sin embargo, este mismo año se ha anunciado el final de su producción: el Beetle es a día de hoy un producto de bajas ventas, pues su formato (compacto, coupe, «premium» y de diseño retro) es muy minoritario.
Así, el «puesto» de modelo retro en la gama Volkswagen será asumido por el I.D. Buzz, una reinterpretación 100% eléctrica de la clásica furgoneta Transporter T1 de los 50 (la típica furgoneta hippie), mientras que el puesto del Beetle Cabrio lo tomará el T-Roc Cabrio, una variante descapotable del B-SUV de Volkswagen, la cual actualmente está en desarrollo. En un principio, la llegada de una nueva generación del Beetle parecía descartada a pesar de la existencia de algunos rumores que apuntaban a su conversión en un coche eléctrico. Rumores que ahora parecen haberse confirmado.
El jefe de diseño de Volkswagen, Klaus Bischoff, declara que antes de tomar una decisión sobre la creación de coches eléctricos pasionales, incluido el Beetle, primero tendrán que centrarse en los coches de volumen. Según Bischoff, las ventajas de la plataforma modular eléctrica MEB podrían permitir hacer más atractivo al modelo al ofrecer más espacio conservando sus formas clásicas.
«El Beetle de hoy es muy atractivo, tanto el coupe como el descapotable de dos puertas, pero está limitado porque es un [pequeño] nicho del mercado. Si miras la MEB, la distancia entre ejes más corta posible es la del I.D. hatchback. Si tomas esto [la plataforma] y lo usas con el Beetle, tienes mucho espacio, así que ya no hay compromiso en la funcionalidad. Entonces podría ser un automóvil muy atractivo».
Bischoff ha confirmado que ya ha hecho un esbozo de cómo sería un Beetle de cuatro puertas basado en la plataforma MEB, si bien pasarán dos o tres años hasta que se apruebe su llegada a producción. De acuerdo con el diseñador, no habría peligro de que el Beetle se solapara con el I.D, pues Volkswagen tradicionalmente siempre ha ofrecido varias opciones dentro del mismo segmento.
Además, también hace referencia a la vuelta a los orígenes que supondría poder dotar al coche de tracción trasera gracias a la plataforma MEB. «Si quisiéramos hacer un Beetle eléctrico, sería mucho mejor que el modelo de hoy, mucho más cercano a la historia, porque podría ser tracción trasera».
Fuente | Autocar
