Realmente sorprendente el éxito que los micro coches eléctricos están teniendo en el mercado de Corea del Sur. Un lugar donde las ventas de coches eléctricos marchan a buen ritmo gracias a los programas de ayudas del gobierno, y a la llegada de nuevas propuestas de los fabricantes locales. Pero las ventas además están creciendo de forma importante en la parte baja de la oferta, con un modelo europeo entre los que más venden.
Es el Renault Twizy. El cuadriciclo francés ha encontrado en este mercado su paraíso perdido. Entre enero y junio de este año se han matriculado un total de 984 unidades del Twizy en Corea. Esto supone que el 90% de la producción de la fábrica de Valladolid ha tenido a la lejana Corea como destino.
Entre las razones para explicar su éxito está que en cada vez mayor interés en las soluciones de movilidad eléctricas para las ciudades. Micro vehículos que cuentan con muchos puntos fuertes, como su tamaño, pero también la facilidad de recarga de sus baterías. En el caso de Twizy en un enchufe convencional necesita apenas 3.5 horas para una carga completa.
Además está que su pequeño tamaño les permite ser una forma de transporte muy económica, con un coste por recarga en el mercado coreano de apenas 47 céntimos de euro.
Esto ha llevado a varios fabricantes a comenzar a ofertar este tipo de vehículos. Una opción que los expertos catalogan como una excelente alternativa para iniciarse en el sector de la movilidad eléctrica, tanto para usuarios como para los fabricantes. Algo que se logra principalmente gracias a los bajos costes de desarrollo y de venta de los mismos.
Como ejemplo el propio Twizy, cuyo precio de venta en Corea está en 11.600 euros al cambio, batería en propiedad. Un coste que los interesados pueden reducir hasta los 5.800 euros después de descontar las generosas ayudas que el gobierno coreano ofrece a la compra de estos vehículos.
A esto añadir otros factores que tienen un peso muy importante. Por ejemplo la seguridad respecto a moverse en un vehículo de dos ruedas, como un ciclomotor. Algo que ha llevado a la empresa postal de Corea a comenzar un proyecto que para 2020 pretende sustituir hasta el 66% de su flota de motos de reparto con micro-coches eléctricos como el Twizy. Una acción que busca reducir el número de accidentes que sufren sus repartidores, con una tasa de 300 cada año.
También importante el aspecto económico. Además de un precio competitivo gracias a las ayudas, los micro eléctricos tienen una vida útil más larga que las motos y ciclomotores. Según el servicio postal coreano, mientras que estas tiene una vida estimada de entre tres y cuatro años, un micro-eléctrico puede llegar a los 8 años. Algo que permite compensar su mayor coste inicial
Una combinación que como vemos está provocando que la demanda no pare de crecer, e incluso la propia Renault está valorando la posibilidad de mover parte de la línea de producción del Twizy de la planta de Valladolid a Corea. Algo que les permitiría reducir los costes logísticos ya que como recordamos, las baterías del propio Twizy se fabrican en Corea.
