Tesla llama a revisión a 123.000 Model S por problemas de corrosión en los tornillos de la dirección asistida

Tesla está teniendo una semana, cuanto menos, complicada. Tras salir a la luz varias previsiones de especialistas financieros que colocan a la marca en la cuerda floja (lo que ha provocado una caída significativa de sus acciones), así como la polémica levantada en torno al accidente mortal que tuvo un Model X (el cual acabó incendiándose) cuando tenía el Autopilot activado, ahora Tesla debe enfrentarse a un nuevo problema: se ha visto obligada a llamar a revisión a unas 123.000 unidades del Model S por problemas en la dirección.

El objetivo de esta llamada a revisión es reparar un tornillo diseñado para ayudar a la dirección asistida. El fabricante californiano ha observado una corrosión excesiva en los tornillos de la dirección en climas muy fríos, concretamente en áreas en las que se usan sales de calcio o magnesio para descongelar las carreteras. El problema se notificó por primera vez en un servicio técnico de Montreal, en Canadá. De no cambiarse la pieza, se hace más difícil conducir el automóvil, si bien la compañía afirma que no afecta al control del coche a gran velocidad.

La llamada a revisión solo se hará a unidades del Model S fabricadas antes de abril de 2016, y de acuerdo con las declaraciones de Tesla a The Wall Street Journal, afecta a menos del 0,02% de las unidades. A nivel económico esta llamada a revisión no afectará a Tesla, pues es el proveedor del tornillo el que se está haciendo cargo de los costes de las reparaciones.

Sin embargo, la imagen de Tesla no sale muy bien parada, pues en plena crisis por intentar escalar la producción del Model 3, la marca debe intentar calmar a los inversores y a la bolsa, pues algunos reputados economistas ya pronostican la caída de la compañía norteamericana para los próximos seis meses.

Fuente | Quartz