¿Debería Tesla diferenciar más sus modelos Performance?
3 min. lectura
Publicado: 12/05/2018 19:05
Desde su primera aparición en el Model S, las versiones Performance de los modelos Tesla se han caracterizado por ser las más prestacionales de la gama. Actualmente, dos modelos gozan de dicho apellido: los Model S y Model X P100D, si bien anteriormente existieron dentro de la familia Model S versiones menos evolucionadas (P85, P85+, P85D, P90D…). La semana que viene, el Model 3 recibirá su propia versión Performance, que se situará como tope de gama del sedán.
Es muy usual en la industria que todas las marcas tengan una división deportiva encargada de preparar las versiones más prestacionales de sus vehículos. Así, en Mercedes-Benz podemos encontrar los modelos AMG, en BMW los M, en Audi los RS… Normalmente, estos modelos no son simples versiones potenciadas de los modelos en los que se basan, sino que tienen profundas modificaciones a nivel de chasis y carrocería.
Citando a algunos rivales del Model 3, podemos encontrar los modelos Audi RS4 (basado en el A4), BMW M3 (basado en el Serie 3), Mercedes-Benz C 63 AMG (basado en el Clase C), Alfa Romeo Giulia QV, Lexus IS F… El Model S por su parte se enfrenta a los RS6, M5, Clase E 63 AMG, GS F…
El Model S P100D bate a todos estos modelos en aceleración, gracias a sus 2,5 segundos en el 0 a 100 km/h en modo Ludicrous. Sin embargo, es incapaz de igualarse a ellos en dinámica, agilidad, eficacia… Incluso exteriormente no deja de ser un Model S más: hasta ahora, los Performance han sido simples versiones potenciadas de los modelos de Tesla, sin aportar mejoras de especial calado en el chasis que les den un comportamiento más deportivo, o una estética más exclusiva. Dicho de otra forma, sólo es rápido en línea recta.
Parece que el Model 3 seguirá la misma tendencia, con una estética y un chasis que no deberían ser demasiado diferentes de los vistos en la actual versión Long Range. Si bien es probable que tenga una aceleración muy superior a sus rivales, sus cualidades dinámicas seguramente no estén a la altura de la competencia.
¿Debería Tesla convertir sus modelos Performance en versiones más enfocadas al rendimiento, con una puesta a punto más agresiva y una estética más deportiva y diferenciada para así ganar imagen frente a sus rivales del segmento premium?