Desde la llegada del Autopilot 2.0 en 2016, Tesla y su director ejecutivo Elon Musk han estado prometiendo a lo largo de los años a sus clientes la llegada «inminente» de la capacidad de conducción autónoma total a sus coches. Una función cuyo desembarco sin embargo se ha visto afectado en diversas ocasiones por numerosos retrasos. Con todo, parece que finalmente 2019 será el año en el que la capacidad de conducción autónoma total (Autopilot 3.0) llegará al mercado.
Durante un reciente podcast al que fue como invitado, Musk estuvo debatiendo sobre diversos aspectos relativos a la movilidad del futuro. Sin ir más lejos, se habló de una estimación que preveía un aumento en las ventas de coches eléctricos de hasta 20 veces respecto a las cifras actuales para el año 2023, unos números que el propio Elon Musk ve como «razonables». Según sus estimaciones, para 2021 Tesla tendrá capacidad para producir 1,5 millones de vehículos al año, y hasta 3 millones en 2023, si bien se mostró cauto y afirmó que en realidad era difícil predecir la curva de crecimiento.
Sin embargo, a la hora de hablar de la conducción autónoma Musk fue mucho más claro, realizando unas declaraciones verdaderamente interesantes en relación al desarrollo del sistema de conducción autónoma Autopilot. De acuerdo con el director ejecutivo, para finales del año 2019 los coches Tesla dotados de la opción «capacidad de conducción autónoma total» estarán completos, «…lo que significa que el coche podrá encontrarle en un estacionamiento, recogerlo, llevarlo a su destino sin intervención…»
Según Musk, está muy seguro de que se vaya a lograr este progreso, añadiendo que todas las semanas supervisa el programa del Autopilot y su ingeniería, si bien aclara que eso no significa que no vaya a necesitar supervisión humana, además de la aprobación de los reguladores pertinentes. Con todo, Musk cree que para finales del año 2020 los coches con Autopilot ya podrán conducir sin intervención humana.
Esta predicción es mucho más ambiciosa que la mayoría de estimaciones realizadas por los expertos de la industria, si bien no sería de extrañar que se viera afectada a retrasos, como suele ocurrir con los proyectos de la marca californiana. Con todo, lo que parece claro es que los próximos dos años serán vitales para Tesla, tanto a nivel productivo, pues quieren aumentar su volumen de fabricación de forma exponencial, como tecnológico, con el desarrollo del Autopilot 3.0 y de la capacidad de conducción autónoma total asociada a él.
Fuente | ARK Invest
