Shell acaba de adquirir el fabricante de baterías para el hogar alemán Sonnen, el cual además de packs enfocados para un uso doméstico hace poco también comenzó a ofrecer productos relacionados con la carga de coches eléctricos. Shell ya había invertido anteriormente 60 millones de euros en la compañía; sin embargo, ahora pasará a convertirse en una división más del gigante petrolífero británico.
El producto más importante de Sonnen es la sonnenBatterie, similar a la Tesla Powerwall. Actualmente se ofrece en dos versiones, la eco y la ecoLinx, que es más avanzada y dispone de funciones de domótica. Además, el año pasado presentaron su sonnenCharger, un cargador para coches eléctricos doméstico que permite a los usuarios recargar su vehículo con energía solar.
Actualmente Sonnen ofrece su gama de productos en Estados Unidos, Europa y Australia. Hasta el momento han instalado más de 40.000 packs de baterías domésticas, producidos en sus fábricas de Alemania, Australia y Estados Unidos. Por lo tanto, estamos hablando de una empresa con proyección internacional, varias fábricas y presencia en algunos de los mercados más importantes del mundo.
Este movimiento por parte de Shell es uno más dentro de sus numerosos planes para acercarse a la electrificación y diversificarse más allá del petroleo. Recientemente, la petrolera compró el instalador de puntos de carga rápida EV Greenlots e invirtió en Ample, una compañía especializada en el intercambio de baterías (tecnología por la que todavía apuestan fabricantes como NIO).
Ya en 2017 Shell comenzó a instalar puntos de carga en sus gasolineras de Reino Unido, adquiriendo la red de carga NewMotion ese mismo año. Shell también es propietaria de First Utiliy, una empresa suministradora de electricidad en Reino Unido. Respecto a la adquisición del fabricante de baterías domésticas, Christoph Ostermann, director ejecutivo y co-fundador de Sonnen, declara lo siguiente:
«Shell New Energies es el socio perfecto para ayudarnos a crecer en un mercado que se está expandiendo rápidamente. Con esta inversión, nos complace ayudar a más hogares a ser independientes energéticamente y beneficiarse de las nuevas oportunidades en el mercado de la energía. Shell ayudará a impulsar el crecimiento de Sonnen a un nuevo nivel y acelerará la transformación del sistema energético».
Parece que la transformación de Shell en un gigante del sector eléctrico es imparable, algo que pone en evidencia el hecho de que el futuro de la movilidad pasa por la electrificación y por el inexorable retroceso del petróleo. Una realidad de la que ya se están comenzando a dar cuenta competidores como BP, que está realizando movimientos similares.