Faraday Future intenta evitar su quiebra inminente gracias a un trato de última hora

Faraday Future, una de las marcas más polémicas del panorama actual, vuelve a estar en problemas. Tras meses de idas y venidas, de no pagar a empleados y proveedores, de directivos que dimiten y de retrasos en la producción de su primer modelo, el FF91, parece que su quiebra cada vez está más cerca debido a las enormes deudas que acumula.

A pesar del interés que ha despertado la marca entre numerosos potenciales clientes y de las inversiones multimillonarias realizadas por diversos accionistas, lo cierto es que la pésima gestión de la compañía amenaza con llevarla al desastre, situación que contrasta con la de otras empresas similares como NIO y BYTON, también de origen chino.

El mayor inversor de Faraday Future es Evergrande Health Industry Group Limited, una división de uno de los mayores grupos inmobiliarios de China. Hasta ahora, Evergrande ha tenido numerosos problemas con Faraday Future, pues no permitían que la compañía buscara más financiación para sacar adelante su proyecto. Ahora, y con el fin de evitar su bancarrota, por fin le han dado permiso.

A pesar de todo, las posibilidades de que la compañía consiga sobrevivir y salir adelante no son muchas, pues no parece que exista demasiada confianza hacia ella tras tantas idas y venidas. Por otro lado, y en caso de que la empresa logre nuevas formas de financiación, todavía está por ver si eso les permitirá simplemente saldar sus numerosas deudas con trabajadores y proveedores, o si también les dará el impulso necesario para terminar el lanzamiento del crossover de lujo FF91.

En el nuevo acuerdo con Evergrande, Faraday Future acepta entregar a su principal inversor sus operaciones en China, el cual por otro lado se ha comprometido a revisar su acuerdo inicial y a permitir que la marca busque otras formas de financiación. Según el acuerdo original, Evergarde debía abonar 2.000 millones de dólares a Faraday Future en tres pagos a cambio de un 45% de las acciones de la compañía.

De acuerdo con Faraday Future la valoración de la compañía es de 3.250 millones de dólares, por lo que en base a ello buscarán nuevos socios financieros que se adapten a sus nueva situación. Sin embargo, y teniendo en cuenta la precaria situación en la que se encuentra Faraday Future, así como la existencia de numerosos proyectos más viables que este en los que invertir (Tesla, NIO, BYTON, Lucid…), parece poco probable que la marca vaya a poder sobrevivir.

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