La demanda de petróleo en China bajará este año por el impacto de los vehículos eléctricos
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Publicado: 20/03/2019 11:16
En los últimos años la importación de petróleo de China ha seguido creciendo a la par que la economía, con un 5% más en 2017, y un 4% más en 2018. Pero según los expertos, el pasado año se habría llegado a un punto máximo que dará comienzo a un retroceso en las cantidades de petróleo que importa el gigante asiático.
Los expertos achacan esto principalmente a la expansión de los vehículos movidos por electricidad. Tanto los modelos privados, como sobre todo los colectivos. Sectores como los autobuses eléctricos están dando un buen mordisco a las importaciones de carburantes debido a su mayor tamaño, y a su cantidad de horas diarios de trabajo.
Según Bloomberg, cada 1.000 autobuses eléctricos permite desplazar el consumo de 500 barriles diarios de diésel. Una cifra que comparan con los apenas 15 barriles que retiran 1.000 vehículos privados. Esto lleva a estimar que la expansión de las flotas de autobuses eléctricos, permitirán que a lo largo de este año se logre alcanzar una cifra de 270.000 barriles diarios de diésel que se dejarán de consumir cada día gracias a la ampliación imparable de las flotas de autobuses impulsados por electricidad.
Según los analistas de Bloomberg, la desaceleración de la tasa de crecimiento en el consumo de petróleo y los carburante derivados se debe principalmente a la cada vez mayor presencia de vehículos impulsados por combustibles alternativos. De esa forma pronostican que la demanda de petróleo de China caerá y el consumo de gasolina se debilitará en el período 2018-20.
Entre las razones de esta dinámica además del cada vez mayor número de vehículos eléctricos en las carreteras chinas, también están las medidas puestas en marcha por el gobierno, que ha decretado medidas cada vez más agresivas para luchar contra las horrorosas cifras de contaminación de sus ciudades. Algo que les ha llevado tanto a promocionar las ventas de eléctricos, como a reforzar los estándares de eficiencia de todos los vehículos, e incluso a limitar su venta en determinadas regiones colapsadas por el tráfico y las emisiones del transporte.
Un impacto en la importación de petróleo que es pequeña, pero muy significativa desde el punto de vista simbólico ya que marca lo que para muchos es el principio de la caída de la venta de carburantes. Y es que en conjunto, los autobuses y los vehículos eléctricos representan una parte muy pequeña de las ventas. Pero a pesar de ello, su presencia ya se está dejando notar en una industria que verá como en los próximos cinco años las ventas de este tipo de vehículos se dispara en todo el mundo, y que ayudará a reducir más rápidamente la demanda del oro negro.
Via | Bloomberg | China Daily