Europa necesitará como mínimo ocho grandes fábricas de baterías para ser competitiva

Europa necesitará como mínimo ocho grandes fábricas de baterías para ser competitiva
Northvolt

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Publicado: 09/04/2019 08:14

A día de hoy, Asia ejerce un dominio casi absoluto en la industria de las baterías, con empresas procedentes de Corea del Sur (LG Chem, Samsung SDI, SK Innovation), China (CATL, BYD) o Japón (Panasonic) como principales productores de celdas a nivel mundial. De no revertirse esta situación se producirá una clara pérdida de competitividad de la industria europea según se vaya implantando el coche eléctrico.

De acuerdo con las estimaciones realizadas por la Comisión Europea, el viejo continente necesita entre ocho y diez gigafábricas de baterías para poder mantenerse competitiva frente al dominio asiático. Se habla de gigafábrica y no de plantas normales debido a que las inversiones son tan elevadas que sólo pueden rentabilizarse con un gran volumen de producción, modelo que ya están siguiendo Panasonic y Tesla con su Gigafábrica 1 de Nevada.

Si bien por el momento Panasonic sigue siendo el primer productor mundial de baterías, la suma de los diferentes fabricantes chinos ha conseguido desbancar tanto a los japoneses como a los surcoreanos. Así, la inmensa mayoría de fábricas de baterías se encuentran en Asia, mientras que las pocas fábricas que hay en Europa pertenecen mayoritariamente a empresas de origen asiático.

Europa está intentando acelerar el desarrollo de su propia industria de baterías. Hace dos años fue lanzado el proyecto de la Alianza Europea de las Baterías de la mano de Maroš Šefcovic, vicepresidente de la Comisión. Ahora, se han comenzado a dar los primeros pasos para ejecutar los planes de este proyecto, como la línea piloto de la primera gigafábrica europea, que estará en Suecia y será operada por Northvolt.

La propia Northvolt ha llegado a un acuerdo con Volkswagen y otras empresas para crear el consorcio European Battery Union (EBU), mediante el cual tratarán de impulsar la investigación y el desarrollo de baterías en Europa. Con todo, las inversiones necesarias son tan grandes que países como Alemania y Francia se están aliando para poder ejecutar planes conjuntos destinados a impulsar esta incipiente industria.

El elemento diferencial por el que quiere apostar Europa es la sostenibilidad, centrándose en una producción de baterías ecológica, con materias primas obtenidas de forma más limpia, procesos de producción más eficientes y haciendo especial hincapié en la reutilización y el reciclaje de los packs una vez hayan finalizado su vida útil. Así, la Unión Europea está impulsando diferentes proyectos que contemplan el darle una segunda vida a las baterías en sistemas de almacenamiento energético.