Análisis de un Tesla Model S de 2015 después de 734.000 kilómetros

Análisis de un Tesla Model S de 2015 después de 734.000 kilómetros

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Publicado: 23/05/2019 11:31

Si eres de los muchos que está pesando en comprarse un Tesla, pero los precios de las unidades a estrenar son inalcanzables, posiblemente estés valorando la compra de una unidad de ocasión. La opción más económica, y cada vez más accesible, en una decisión que facilitan aspectos como la robusta garantía de 8 años sin límite de kilometraje en aspectos clave como la batería y el sistema de propulsión.

Esto quiere decir que incluso unidades como la que vamos a conocer hoy, continúen estando dentro de la cobertura de Tesla, y eso a pesar de que en su marcador ya acumula nada menos que 734.000 kilómetros. Una cantidad que además ha realizado en un período muy corto de tiempo, poco más de tres años, en los que ha funcionado como servicio de taxi en la zona de Los Angeles, California.

Ahora después de este tiempo de trabajo, los propietarios de este Model S 85D han realizado un interesante vídeo repasando el estado actual del coche, desde el exterior, que nota el paso de los kilómetros, especialmente en su parte delantera donde el choque de pequeñas piedras ha ido desgastando el frontal. Algo totalmente normal en un coche que tiene como principal trabajo el transportar personas a largas distancias por carreteras y autovías. También comentan que los sensores de aparcamiento han tenido algún problema, llegando a caerse en alguna ocasión. Pero después de su recolocación han continuado funcionando perfectamente.

Pero lo realmente interesante es saber los costes de mantenimiento de esta unidad después de tantos kilómetros a su espalda. Antes de nada avisan de que la empresa que opera el coche, Tesloop, no tiene ningún acuerdo especial con Tesla para el mantenimiento de los vehículos, y que todas las operaciones se han realizado en sus instalaciones. Por lo que los costes serán los mismos para un particular.

Después de estos más de 700 mil kilómetros, el Model S ha requerido un total de 27.000 dólares, incluyendo todos los elementos de desgaste, como neumáticos, así como los mantenimientos y revisiones. Un costes realmente reducidos si los comparásemos con los de cualquier berlina diésel o gasolina de similares características, y a los que apenas han tenido que sumar gastos de electricidad, ya que han usado principalmente la red de Supercargadores donde tienen acceso ilimitado y gratuito.

La gran pregunta es después de este tiempo el estado de la batería. En este aspecto esta unidad no ha tenido tan buen resultado, y ya ha necesitado dos cambios del pack. El primer cambio realizado a los 312.000 kilómetros, al parecer por un problema que indican, ha podido tener que ver con el uso extremo que esta ha recibido, con recargas del 0 al 100% cada día, y además usando los cargadores de alta potencia de Tesla.

La segunda batería ha tenido que cambiarse a los 521.000 kilómetros, algo que nos indica que esta ha tenido una duración de 209.000 km. Un cambio motivado por un mal funcionamiento de la misma que no evitaba que el coche se moviese, pero daba algunos problemas en las cargas y en momentos puntuales. La buena noticia es que Tesla de nuevo sustituyó la batería de forma gratuita, y además lo hizo con un pack de 90 kWh en lugar del de 85 original.

Con este último pack, el Model S lleva recorridos  otros 202.777 kilómetros, y muestra una degradación del 9%. Una batería que ha permitido no sólo recuperar la autonomía original del Model S, que eran 442 kilómetros reales, sino que ha permitido elevar la cifra hasta los 474 kilómetros con cada carga.

También os muestran el gráfico de degradación de cada pack, y como la autonomía se ha recuperado en cada uno de los dos cambios de batería que han tenido, teniendo el segundo pack una curva más pronunciada que la primera o la tercera. Algo en lo que tiene su influencia tanto el número de cargas rápidas, como el uso del propio coche, que en su última fase ha pasado de taxi a coche de alquiler.

En el aspecto del motor, el trasero continúa siendo el original, teniendo que ser sustituido el delantero después de apenas 32.000 kilómetros recorridos por un problema de fabricación. Desde entonces ambos sistemas han seguido trabajando sin problemas. Algo que nos muestra la importante mejora que ha tenido Tesla en este aspecto en los últimos años.

Por supuesto, el paso de los años ha tenido su efecto en el interior del coche. Especialmente en la parte izquierda del asiento del conductor, que recibe un mayor desgaste por la entrada y salida del mismo. Pero no indican ningún error, más allá del pequeño ruido que produce el sistema eléctrico que mueve el asiento. Por lo demás, todos los elementos siguen siendo los originales.

Sin duda lo más llamativo es la prueba de conducción, donde indican que a pesar del paso del tiempo y los kilómetros, la conducción del coche incluso ha mejorado. Algo que es posible gracias a las actualizaciones que ha estado realizando Tesla. Algo que por ejemplo, le permite mantener unas cifras de aceleraciones más que llamativas, con un 0 a 60 millas por hora en apenas 4.7 segundos.

Otro aspecto interesante es que han querido saber el coste de esta unidad en el mercado de ocasión. Para ello han introducido todos los datos en la página Kelley Blue Book, que se encarga de analizar los datos y proporcionar una valoración estimada del vehículo. Una información que ha dado como resultado un coste de 15.000 dólares.

Ahora la pregunta es ¿te comprarías un Tesla Model S 85D con 700.000 kilómetros por 15.000 euros?. Un modelo que recordamos, todavía tiene garantía en motor y batería hasta 2023.


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Fuente | Youtube