Grupos de voluntarios ayudan a Tesla en China para lograr cumplir los objetivos de entrega

Que Tesla ha logrado convertirse en mucho más que una simple marca de coches es algo que pocos pueden negar hoy en día. Ha logrado crear una comunidad simplemente por su decidida apuesta por una tecnología que otras marcas hace poco denigraban o luchaban en los despachos para lograr frenar su expansión. Algo que le ha valido a los norteamericanos para convertirse en un símbolo del cambio que ahora el resto de marcas está comenzando a abrazar.

Un ejemplo del valor de marca y la comunidad de Tesla está en la ayuda que de forma totalmente desinteresada y gratuita muchos usuarios está ofreciendo a la marca para lograr solucionar uno de sus principales problemas, la entrega. Y es que este proceso supone un tiempo que ralentiza las entregas debido a la falta de personal. Una falta que tiene que ver con las estrecheces económicas de la marca que necesita recortar allá donde puede.

Y es que las inversiones se han centrado en el incremento de la producción de la fábrica de Fremont y la Gigafábrica de Nevada, al mismo tiempo que se pone a toda velocidad en funcionamiento la fábrica de China. Algo que hace que otros departamentos en un principio menos importantes como el personal de entrega se haya quedado algo corto.

Para ayudar grupos de usuarios están destinando su tiempo en ayudar a los nuevos clientes que no quieren esperar a que Tesla les otorgue un turno para la entrega, y de esa forma aceleran los plazos para que estos clientes puedan tener el coche en sus manos, y de paso ayudan a Tesla a lograr un impulso extra que les permita lograr cumplir con los ambiciosos objetivos de entregas de este segundo trimestre.

Además de acercarse a los centros de distribución para ayudar de forma directa a los clientes, estos voluntarios también trabajan en las redes sociales solucionando dudas de los nuevos propietarios, así como organizando reuniones de usuarios en los que explican de forma directa y personal todas las características de sus coches.

Gracias a esta ayuda, Tesla estaría logrando entregar unas 1.000 unidades diarias entre sus tres modelos, algo que se espera permita a la marca de California alcanzar un nuevo récord histórico de entregas, alcanzando las 100.000 unidades. Algo que elevaría los ingresos hasta una cifra estimada de 6.800 millones de dólares, con un beneficio que se colocaría en torno a los 300 millones de dólares.

Un trabajo gratuito que sin duda beneficia a Tesla, tal como lo hace el trabajo realizado por el resto de usuarios que desde el principio han realizado labores comerciales de forma gratuita, o mediante incentivos como los programa de Referidos, y a los que Tesla no ha llamado, sino que han acudido de forma voluntaria para lograr acelerar la transición hacia una forma de movilidad más limpia. Una dinámica que Tesla ha logrado capitalizar de una forma sencilla, y es apostando por la misma sin tapujos desde el primer momento.

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