Las últimas semanas han traído consigo numerosas novedades relativas a las baterías de electrolito sólido. Mientras que Toyota ha confirmado el inicio de su producción para 2021, QuantumScape, aliada del Grupo Volkswagen, ha comunicado que sus nuevas celdas comenzarán a fabricarse de cara al año 2024. Tras estos anuncios, ahora le ha tocado mover ficha a Solid Power.
La compañía comenzará a realizar pruebas de sus baterías de electrolito sólido en 2022. «Suponiendo que nada cambie y los fabricantes de automóviles continúen al ritmo actual, podríamos comenzar la producción para vehículos en 2026 como muy pronto, pero es más probable que en 2027. Estamos en conversaciones con algunos fabricantes que han preguntado por una implementación más rápida», ha declarado Doug Campbell, director ejecutivo de la startup.
Solid Power cuenta con alianzas estratégicas con fabricantes de la talla de BMW, Daimler (Mercedes-Benz), Ford y Hyundai. Actualmente la empresa se encuentra negociando el suministro de sus baterías con un total de ocho grupos automovilísticos, si bien los contratos solo se cerrarán cuando el desarrollo de sus baterías esté más avanzado.
A pesar de que Solid Power no comenzará a producir baterías de electrolito sólido para automóviles eléctricos hasta 2026 o 2027, está previsto que para 2025 ya pueda producir celdas para sistemas de almacenamiento energético. En cualquier caso, para ello será necesaria la colaboración de una empresa externa, pues la startup no tiene prevista la construcción de una fábrica propia.
Así, Campbell quiere que de la producción se encarguen fabricantes de baterías ya establecidos como Panasonic o Samsung SDI, o en su lugar los propios grupos automovilísticos. Uno de los principales candidatos sería Ford, pues la empresa estadounidense está estudiando producir sus propias celdas en el futuro.
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