Para el presidente de Repsol, el problema de la implantación del coche eléctrico en España es la edad del parque móvil

Para el presidente de Repsol, el problema de la implantación del coche eléctrico en España es la edad del parque móvil

5 min. lectura

Publicado: 16/06/2020 11:02

La petrolera española Repsol ha comenzado hace unos años un proceso de diversificación hacía nuevos sectores, como en un primer momento con la adquisición del operador de puntos de recarga IBIL, como luego con su incursión en el sector de la producción y comercialización eléctrica. Pero parece que desde la nueva cúpula siguen con las costumbres del pasado, con grandes proyectos sobre combustibles sintéticos y denostando las posibilidades del coche eléctrico como forma de movilidad sostenible.

Así lo ha indicado el propio consejero delegado de Repsol, Josu Jon Imaz, que en un encuentro con inversores donde ha presentado sus nuevos proyectos para levantar dos fábricas en Bizkaia para producir combustibles «eco» a partir de hidrógeno verde y CO2 capturado como principales materias primas, así como a partir del tratamiento de residuos urbanos.

Una alternativa que para el presidente de Repsol es una forma mucho más rápida y eficiente de reducir las emisiones contaminantes, frente a una electrificación que se enfrenta a grande retos para su implantación masiva.

Pero cuáles son estos retos según el presidente de la petrolera: ¿autonomía, tiempos de carga, precios?. No, según el Sr Imaz, el principal problema que frena la electrificación del transporte en España es «la motorización y la antigüedad del parque de vehículos», y no la capacidad de generarlos mediante energías sostenibles.»

Para el directivo vasco, el parque móvil en España ha vivido un retroceso en los últimos años, principalmente por culpa del impacto de la anterior crisis, y que ha llevado según sus palabras, la media de 8 a 12.6 años por vehículo.

«El problema para adaptarse a la descarbonización de combustibles no radica en la capacidad de generarlos o de integrar energías renovables en las operaciones de refino para sus procesos industriales, sino en que el parque de vehículos es viejo y antiguo, con una motorización que emite muchas emisiones locales y por tanto, su desarrollo dependerá de la evolución de los motores.»

La alternativa que proponen desde Repsol es la producción de combustibles sintéticos a partir de CO2 porque «no es un contaminante local, sino un elemento nocivo a tratar»; por lo que el nuevo combustible extraído surge de un CO2 «que no ha sido emitido o que ha sido extraído de una corriente o fuente de generación, y, por tanto, es neutro ecológicamente en todo su ciclo, en cuanto a emisiones contaminantes, tanto en su origen, como al final del proceso».

Opinión

Si, como vosotros, nosotros tampoco hemos entendido mucho de lo que ha querido decir decir el Sr Imaz. Entendemos que defiende la producción de combustibles sintéticos y del llamado hidrógeno verde, que no es otra cosa que la producción de hidrógeno usando el proceso de electrólisis del agua. Un proceso que requiere de electricidad, que se tendrá que obtener en su totalidad de fuentes renovables para lograr cerrar el proceso sin emisiones. Una forma complementaria de reducir emisiones, pero también de lograr mantener una parte de su viejo negocio de producción y distribución controlada de un «combustible». 

Pero que la culpa del lento avance de la movilidad eléctrica la tenga la edad del parque móvil no tiene pies ni cabeza. La culpa la tienen las nefastas políticas realizadas por todos los gobiernos, que han mantenido al coche eléctrico y la movilidad sostenible como un complemento decorativo para sus discursos, pero que luego dotaban de forma ridícula y llenaban de trabas burocráticas su puesta en marcha.

Algo que ha creado un escenario muy poco propicio donde la ya difícil decisión de dar el salto a un coche 100% eléctrico, en un país sin apenas puntos de carga por culpa de la ridícula legislación que deja a las eléctricas campar a sus anchas frenando el despliegue de los operadores independientes, se  hace más difícil todavía un escenario donde los consumidores son bombardeados por mensajes contradictorios que llegan desde la administración pública.

Vía | Elperiodicodelaenergia

Este artículo trata sobre...