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Reino Unido alerta del riesgo de apagones por culpa del coche eléctrico si la red no se adapta

El presidente de la Comisión de Transportes de la Cámara de los Comunes de Reino Unido, Huw Merriman, ha lanzado la voz de alarma sobre los riesgos que el coche eléctrico puede suponer para la red eléctrica nacional si esta no se adapta. En base a un estudio el político avisa de posibles apagones en partes del país cuando millones de coches recargan sus baterías.

Reino Unido ha fijado para 2030 el fin de las ventas de automóviles de combustión interna, para esta fecha el coche eléctrico no será algo marginal o minoritario, sino la regla. Como consecuencia de esta situación, Merriman lanza el aviso de los riesgos que puede suponer la recarga simultánea de todos estos vehículos cero emisiones.

El informe aludido por el presidente de la Comisión de Transportes, indica que si no se toman las medidas necesarias para reforzar la red de distribución, cuando millones de automóviles comiencen a cargar sus baterías se producirán cortes del suministro eléctrico en amplias áreas del país.

Para 2030, por tanto, debería estar disponible una red capaz de absorber la demanda puntual de cientos de miles de coches eléctricos cargando al mismo tiempo. Lo que no está claro a día de hoy es la política y las inversiones que han de realizarse para garantizar el equilibrio del sistema y la red eléctrica británica.

Desde el parlamento británico ha pedido un cuadro normativo claro para realizar y programar las inversiones necesarias para garantizar una infraestructura y red de carga necesaria, para conseguir los objetivos marcados desde el gobierno.

Para esto será necesario realizar un cronograma preciso para que todo Reino Unido pueda garantizar la transición sin que la red colapse ante la demanda energética.

El gobierno de Boris Johnson quiere tener definida una estrategia nacional para las infraestructuras, que se incorporara a las políticas de descarbonización de la economía y del transporte.

La red de carga destinada al coche eléctrico en Reino Unido debe contar para 2030 de 2.500 estaciones de carga, que deberán llegar a 6.000 en 2035.

En la actualidad Reino Unido cuenta con 25.000 puntos de carga, cifra que para los expertos ha de duplicarse, si se quiere atender la demanda provocada por la transformación de la movilidad hacia el coche eléctrico.

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