Anunciada a primeros de julio de forma oficial, la alianza entre Porsche y Rimac ya está en marcha. El 31 de octubre abandonó su puesto Stefan Winkelmann como CEO de Bugatti, por lo que ya solo se preocupará de Lamborghini, otra de las marcas halo de Volkswagen. La joint-venture de Bugatti y Rimac pasa a estar comandada por Mate Rimac, CEO y fundador de Rimac Automobili allá por 2009.
En la nueva empresa, Porsche tiene el 45% del accionariado, Rimac Group el 55% restante, donde también se incluye capital de Hyundai y la propia Porsche. La marca de Stuttgart empezó a invertir en Rimac en 2018. Un año y poco después, la participación en Rimac aumentó al 15,5%, y ya en primavera de este año Porsche se había hecho con el 24% de Rimac Group. Es la participación que mantiene actualmente.
Con esta alianza, el imperio Volkswagen diversifica sus riesgos y tiene al socio adecuado para convertir en Bugatti ya no en lo más exclusivo en coches a gasolina, sino en lo más exclusivo en coches a baterías. A nivel de constructores y marcas, tanto Bugatti como Rimac seguirán funcionando de forma independiente, con los mismos centros de producción -Bugatti en Molsheim (Francia) y Rimac en Zagreb (Croacia)-, y con sus respectivas redes de distribución.
La sede de la joint-venture se ha establecido en Sveta Nedelja (Croacia). En el Consejo de Supervisión de Bugatti-Rimac estarán sentados tanto el presidente del Consejo de Dirección de Porsche, Oliver Blume, como el vicepresidente y miembro de dicho Consejo de Dirección -como responsable de Finanzas (CFO)-, Lutz Meschke.
También estarán el ex gerente de Producción y Codirector General de Bugatti Automobiles, Christophe Piochon, que adopta el papel de director general de operaciones (COO), Larissa Fleischer como Directora General Financiera (CFO) -previamente directora de Controlling en Porsche para la digitalización y el desarrollo de nuevos modelos de negocio-, y Emilio Scervo, anterior Director de Ingeniería de McLaren, nombrado director general de Tecnología (CTO) de la empresa conjunta.
«Los equipos de Zagreb, Molsheim, Wolfsburg y Stuttgart han trabajado muy duro y, con seguridad, llevarán a la nueva empresa hacia un futuro brillante»
Lutz Meschke, CFO de Bugatti-Rimac
En 2023 se producirá el traslado a unas nuevas instalaciones, con un coste de 200 millones de euros, donde se quedará establecida la sede. Allí acabarán trabajando 2.500 personas en un espacio de 2.500 200.000 metros cuadrados, donde también se localizará la investigación y desarrollo de la empresa conjunta. Actualmente la plantilla de la empresa asciende a 435 personas, desglosadas en 300 en Zagreb y 135 en Molsheim.
