La startup estadounidense Rivian comenzó la producción en serie de su primer modelo, la pick-up eléctrica R1T, en septiembre del año pasado. Sin embargo, los problemas en el suministro de componentes y varios brotes de COVID-19 en las instalaciones han dificultado la fabricación del vehículo durante sus primeros meses de vida comercial, algo que ahora la compañía quiere solucionar.
De acuerdo con un informe publicado por algunos medios estadounidenses, Rivian detuvo las líneas de producción en su fábrica de Illinois a principios de mes para solucionar una serie de problemas y optimizar sus procesos de fabricación. ¿Su objetivo? Alcanzar a corto plazo una cadencia de 200 unidades a la semana.
Aunque Rivian preveía una producción inicial de unas 50 unidades semanales, lo cierto es que las cifras fluctuaron bastante durante los cuatro últimos meses de 2021. En total, la firma fabricó 1.015 unidades de la R1T, de las cuales entregó 920. Aunque se quedó relativamente cerca de cumplir con su objetivo de llegar a las 1.200 unidades, como consecuencia sus acciones cayeron en picado.
A pesar de todo, Rivian ha sido toda una pionera dentro del pujante sector de las pick-ups eléctricas, pues la R1T ha llegado al mercado antes que rivales como la GMC Hummer EV (finales de 2021), la Ford F-150 Lightning (2022), la Chevrolet Silverado EV (2023), la Tesla Cybertruck (2023) y la RAM 1.500 eléctrica (2024).
Rivian comenzará pronto a fabricar su segundo modelo, el todoterreno R1S
Por el momento, la Rivian R1T se comercializa en una única versión, la cual alcanza una autonomía máxima de 505 km EPA. Se espera que más adelante se sumen tanto una variante más capaz que superará los 640 km EPA como un modelo de acceso cuyo alcance máximo estará limitado a algo más de 400 km EPA.
Rivian ya se está preparando para comenzar a ensamblar su segundo vehículo, el todoterreno R1S. Si bien ya se han producido algunos ejemplares, la empresa todavía está ajustando algunos procesos. Tampoco podemos perder de vista que la marca se está encargando de fabricar las nuevas furgonetas eléctricas de Amazon, su principal accionista.
La planta de Rivian en Illinois originalmente pertenecía a Mitsubishi, si bien la startup se hizo con ella en 2017. Aunque sobre el papel debería tener la capacidad suficiente como para producir 150.000 automóviles al año, la compañía ya está trabajando para incrementarla a 200.000. Además, también ha anunciado la construcción de una segunda planta en Georgia que debería llegar a los 400.000 vehículos.
Fuente | Electrek
