Polestar, la marca deportiva de Volvo, continúa logrando buenas cifras de ventas en los diferentes mercados en los que se va introduciendo. Sin ir más lejos, a mediados del mes de enero introdujo su primer modelo eléctrico, el Polestar 2, en Corea del Sur, un país en el que reinan con puño de hierro dos marcas autóctonas, Hyundai y KIA.
A pesar de ello, apenas dos horas después de abrir los libros de pedidos la compañía ya acumulaba más de 2.000 reservas, algo debido en parte a que el depósito solicitado era de apenas 840 dólares. Al cabo de una semana, dicha cifra ya se había duplicado, lo que evidencia la buena acogida que ha tenido la berlina eléctrica en la región.
«Esta reacción extremadamente positiva al lanzamiento de Polestar en Corea del Sur es otro punto culminante para una marca que está cobrando impulso día a día. Está claro que el arduo trabajo y la dedicación de nuestro equipo en todo el mundo ha dado como resultado otro lanzamiento al mercado de gran éxito y estamos encantados con la respuesta inicial de los clientes en Corea del Sur», ha declarado en relación a estos buenos resultados Mike Whittington, director de ventas global de Polestar.
En paralelo al creciente éxito del modelo, los ingenieros de la compañía continúan trabajando en nuevas evoluciones como el recién presentado Polestar 2 Arctic Circle, un prototipo de rallies con el que se pretende demostrar el rendimiento que puede llegar a ofrecer un coche eléctrico de competición en condiciones adversas (nieve, hielo, etc).
El Polestar 2 Arctic Circle se basa en la versión Long Range AWD con el Performance Pack
Joakim Rydholm, actual ingeniero jefe de chasis de Polestar y piloto de rallies, ha sido el encargado de liderar el equipo responsable de su creación. El Arctic Circle se basa en el Polestar 2 Long Range AWD con el Performance Pack, si bien incorpora una actualización de software (también disponible como opción en el modelo de calle) que incrementa su potencia (476 CV) y par (680 Nm). Además, equipa un inédito sistema de launch control asociado a unas levas tras el volante.
Su altura libre es 3 centímetros superior y dispone de barras de torretas (tanto delante como atrás), mientras que los amortiguadores Öhlins han recibido un ajuste específico y se asocian a unos muelles un 30% más blandos. Las llantas OZ Racing de 19 pulgadas montan unos neumáticos de invierno con clavos hechos a medida. La carrocería pintada en gris mate y blanco, los faros auxiliares y diversos elementos realizados en fibra de carbono terminan de redondear un vehículo que, en un principio, no llegará a producción.
«Quería divertirme más de lo habitual con este automóvil, poder realmente impulsarlo en términos de rendimiento y manejo en un entorno invernal como un lago congelado. El equilibrio y la previsibilidad que hemos logrado con la altura elevada y los neumáticos especiales se notan particularmente cuando entras en una curva completamente de lado, con una sonrisa más grande de lo habitual en tu rostro y en control total», ha señalado Rydholm tras la presentación del vehículo.
