Uno de nuestros lectores ha dado con una interesante solución para poder cargar nuestro coche eléctrico de la forma más económica posible, y no lo hace con una tarifa rompedora o una oferta irrepetible. Se trata de una solución tan sencilla como ingeniosa donde se saca partido a la tarifa de coche eléctrico de Iberdrola, pero no asociado al consumo de la vivienda sino como un segundo contrato que será usado exclusivamente para alimentar el coche. Te contamos como lograr el máximo ahorro.
Tal como nos indica Alberto en sus comentarios, la tarifa de coche eléctrico de Iberdrola destaca por ofrecernos un precio en horario nocturno extremadamente bajo de apenas 3 céntimos de euro el kWh entre la una y las siete de la madrugada. La contrapartida es que durante el día el precio del kWh se dispara hasta los 31.8 céntimos el kWh.
Pero la idea es usar este contrato sólo para cargar el coche eléctrico. La cuestión es que en estas seis horas con un contrato medio de 3 o 4 kW podríamos lograr recargar unos 20 kWh. La diferencia de esta solución es que podremos contratar una potencia mucho mayor ya que el precio de la potencia también está asociada al horario, y por la noche es mucho más barata. Concretamente 5.21 euros por kW y año.
Esto quiere decir que podremos contratar la máxima potencia posible, 15 kW, y pagar apenas 6.5 euros al mes por dicha potencia, más el consumo.
Si nuestro coche no acepta cargar más allá de los 11 kW, entonces podremos ahorrar unos eurillos cogiendo una potencia de hasta 10 kW, lo que supondrá un coste de 4.3 euros al mes en potencia, y por el tramo de acceso, hasta 5 kW, durante el cual podremos cargar unos 27 kWh en esas seis horas, nos costará solo 2.17 euros al mes.
Las cifras del coste de la potencia quedarían de la siguiente manera:
- Hasta 5 kW: 2.17 euros/mes
- Entre 5 y 10 kW: 4.3 euros/mes
- Entre 10 y 15 kW: 6.5 euros/mes
El coste de la forma más barata de cargar tu coche eléctrico
Como vemos, el precio del kWh es ridículo y por ejemplo en estas seis horas si nuestro coche puede cargar a la máxima potencia, supondrá que podríamos recuperar unos 80 kWh contando las pérdidas y con un coste de solo 2.4 euros!!!.
Lo normal es que los coches carguen a un máximo de 11 kW en alterna, por lo que hablamos que en esas seis horas podremos inyectar a nuestro coche en torno a los 60 kWh. Cifra más que suficiente como para alimentar las necesidades incluso de los más exigentes.
Esto supondría un coste por cada 100 kilómetros de unos 50 céntimos de euro. Para cargar una batería de 60 kWh, nos costará solamente 1.8 euros. Un precio realmente ridículo en tiempos turbulentos donde los costes energéticos están disparados.
Por supuesto para aprovechar este contrato tenemos que limitar las horas de carga al horario valle, entre la 1:00 y las 7:00. Algo para lo que necesitaremos o un coche con programador de carga, o un punto dotado de sistema de programación. Un aspecto fundamental para evitar saltar de tramo hasta el caro que como vemos supone multiplicar el coste del kWh.
Nota:
Este no es un artículo patrocinado, por lo que si conoces alguna fórmula para cargar incluso más barato, puedes compartirlo con nosotros en los comentarios y lo añadiremos al post.
Gracias a Alberto y a Fernando por avisarnos de esta excelente alternativa.
