Hace unas semanas, Skoda presentó el prototipo Vision 7S, un SUV eléctrico de gran tamaño que no solo ha servido como carta de presentación del nuevo lenguaje de diseño «Modern Solid», sino que también se constituye como el primer adelanto de un modelo de producción que llegará al mercado europeo a lo largo del año 2026.
Actualmente, la gama eléctrica de Skoda está formada por los Enyaq iV y Enyaq Coupé iV, pues el pequeño CITIGOe iV ya no se comercializa. Dentro de cuatro años, la oferta cero emisiones de la firma checa se enriquecerá con la llegada de tres nuevos modelos: un SUV pequeño (Elroq), un Octavia eléctrico y la versión de calle del Vision 7S.
Todo apunta a que este último será hermano del Volkswagen ID.6, un SUV eléctrico de 4,88 metros de largo vendido exclusivamente en China. Por lo tanto, posiblemente sea uno de los últimos vehículos del Grupo Volkswagen basado en la plataforma modular MEB; sin embargo, no deberíamos descartar que finalmente utilice la nueva SSP.
A día de hoy Skoda ya cuenta con un SUV de siete plazas, el Kodiaq térmico. Sin embargo, el «Vision 7S» se situará una categoría por encima, convirtiéndose en el nuevo buque insignia de la compañía, que cambiará su posicionamiento comercial en los próximos años, lo que probablemente se traduzca en productos más aspiracionales.
La versión de producción del Skoda Vision 7S se lanzará en 2026
El prototipo equipa un pack de baterías de 89 kWh que le permite superar los 600 km WLTP de autonomía; además, puede cargar a un máximo de 200 kW de potencia en corriente continua. Es muy probable que estas especificaciones se mantengan en el modelo definitivo, por lo que se tratará de un vehículo apto para viajes de larga distancia.
En el frontal lucirá la nueva «Tech-Deck Face», una reinterpretación de la clásica calandra corporativa de la empresa. Este elemento integrará una completa batería de sensores tras un cristal oscurecido. Los grupos ópticos adoptarán una llamativa forma de T tanto delante como atrás; además, el logo corporativo será sustituido por el nombre de la marca tanto en el capó como en el portón.
La filosofía de diseño «Modern Solid» y la estrategia Next Level 2030, que tiene como principal objetivo que para finales de la década el 70% de las ventas de Skoda se correspondan con vehículos eléctricos, irán acompañadas por una importante inversión de 5.600 millones de euros en electromovilidad (así como 700 millones en digitalización).
