¿Qué países podrán producir hidrógeno verde más barato a largo plazo? China, Chile, Colombia y Marruecos entre los favoritos
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Publicado: 02/06/2022 06:00
El mundo se está volcando en incrementar la producción de hidrógeno verde como una alternativa a unos combustibles fósiles cada vez más escasos, caros e inestables por culpa de la geopolítica. Unas gigantescas inversiones que permitirá mover el eje de importancia energética actual y donde unos países se están colocando como favoritos para ser los más baratos en su producción.
Para determinar las estimaciones, la Agencia Internacional de Energías Renovables (IRENA) ha publicado un informe donde analiza las características de cada estado con potencial para transformarse en un centro de producción con los precios más bajos.
En estos se tienen en cuenta aspectos como el coste y disponibilidad del suelo, su situación y facilidad de acceso, e incluso la disponibilidad de una fuente de agua segura y económica. Además al ser hidrógeno verde, tiene que producirse con energías renovables, por lo que la inversión y el coste de estas también es un aspecto fundamental.
¿Quién producirá el hidrógeno verde más barato en 2050?
Según el informe, China será el lugar más barato para producir hidrógeno verde a largo plazo. Los datos indican que los productores chinos podrían estar vendiendo hidrógeno verde a un coste nivelado (LCOH) de poco más de 0,65 dólares el kg para 2050, con Chile con prácticamente las mismas cifras.
En el escenario optimista, IRENA estima que por detrás de los chinos y chilenos se situarían mercados como Marruecos, Colombia y Australia, en un escenario “optimista”.
Incluso en el escenario de costes más pesimista, China seguirá siendo muy competitiva al poder vender hidrógeno verde en torno a los 1.10 dólares el kilo, con Colombia alrededor de 1,15 dólares/kg y Australia y Chile alrededor de 1,20 dólares/kg.
Estados Unidos y Arabia Saudita, por su parte podrían lograr costes nivelados de alrededor de 0.75 a 0.80 dólares por kg en el escenario optimista. Unos precios donde entran en juego cuestiones como el acceso al agua, y que podrían disparar los costes de Arabia Saudita hasta los 1.7 dólares el kg según indica el escenario pesimista.
Esto también afecta a Marruecos. Como vemos en el gráfico, en el escenario de optimista los marroquíes tienen potencial para producir hidrógeno verde con costes nivelados comparables a la producción china. Pero la inseguridad respecto al acceso al agua hacen que el escenario pesimista limite la producción en un 63%, con un importante impacto que llevaría el kilo al entorno de los 1.4 dólares.
Colombia, la gran sorpresa y esperanza
Sin duda dentro del listado destaca la presencia en la parte más alta de Colombia. El país americano ha visto como su fuerte apuesta por las renovables está dando sus frutos consiguiendo disparar su capacidad nada menos que 100 veces hasta los 2.8 GW en apenas 24 meses.
El gobierno colombiano se ha marcado como objetivo instalar 3 GW de electrolizadores para 2030, algo que el propio Ministro de Energía colombiano, Diego Mesa Puyo, indicó permitirá que para 2029 podrán vender hidrógeno verde a 1,70 dólares el kg gracias a factores como la amplia disponibilidad de agua, y las velocidades de los vientos marinos de Colombia, que según el Ministro alcanzan los 13 metros por segundo, y que ayudan a que el país tenga unos precios de la electricidad bajos.
Pero sin duda lo más llamativo del cuadro además de la presencia de Colombia en la parte alta, es la presencia de Japón y Corea del Sur en la parte inferior. Dos mercados que han apostado fuerte por la tecnología, pero que no lograrán ser productores del vector, siendo protagonistas en el desarrollo y fabricación de electrolizadores. Pero la falta de suelo, los elevados costes energéticos y la pobre apuesta por las renovables, hará que los dos países asiáticos sean de los más caros del mundo a la hora de su producción incluso a largo plazo.
España por su parte se coloca en la posición 11 casi con las mismas cifras que Arabia Saudita en el escenario optimista, unos 0.85 dólares el kilo. Cifra que se dispara hasta los 1.6 dólares el kilo en el escenario pesimista. Un mercado que sería el primero dentro de Europa y que anima los objetivos de convertir a la Península Ibérica en un hub de exportación energético para la Unión Europea.
Fuente | IRENA