El mercado de las baterías de respaldo está creciendo de una forma sustancial, sobre todo por el abaratamiento y evolución de las celdas LFP. Una química perfecta para estas aplicaciones que muchas veces se enfrentan a problemas como el encontrar un inversor compatible o alguien capaz de realizar una instalación compleja. Pero la nueva Uniti EcoFreedom de la americana KiloVault promete simplificar la operación al máximo.
Esta batería estará disponible en dos versiones con celdas de litio-ferrofosfato (LFP). Una con una capacidad bruta de 10,2 kWh y útil de 9,6 kWh, e incluye interruptor automático de corriente alterna y tomas de corriente para permitir que las cargas fluyan directamente desde la batería. Un sistema monofásico con una potencia de salida nominal de 5 kW.
La siguiente opción es el modelo Kilovault EcoFreedom 10. En este caso cuenta con una capacidad bruta de 20 kWh y nominal de 18 kWh, aunque los clientes podrán seleccionar una versión ampliada que llega a los 27.6 kWh. Una batería formada por celdas blade también LFP. Tiene protección contra sobretensiones de alterna de hasta 20 kW y está preparado para una entrada de una instalación solar de hasta 11 kW.
Curiosamente, desde Kilovault también se ha presentado una versión dotada de baterías de plomo. Una opción algo obsoleta que por otro lado permite ofrecer un producto más sencillo y económico. Un pack de 8.64 kWh brutos, que se quedan en apenas 4.3 kWh útiles, y una potencia máxima de salida de 5 kW.
Una opción que sus diseñadores describen como una alternativa más sencilla de instalar, lo que reducirá la necesidad de encontrar varios profesionales, lo que reduce el tiempo de instalación y también el coste.
Unas baterías que en su versión básica tienen un precio de 9.999 dólares, mientras que la versión de 20 kWh llega a los 12.999 dólares. Por su parte la más económica dotada de celdas de plomo arranca en los 6.999 dólares.
Fuente | Kilovault
