Mercedes-Benz utilizará las baterías Blade de BYD en el CLA eléctrico

El poderoso grupo chino BYD no es sólo uno de los principales fabricantes de coches eléctricos del planeta, sino también el segundo mayor productor de baterías tras su compatriota CATL. Lejos de limitarse a utilizarlas exclusivamente en sus propios vehículos, también suministra a otras marcas como Ford, Tesla o Toyota.

De acuerdo con un informe recogido por la prensa china, la próxima en unirse a este grupo será Mercedes-Benz, que empleará las baterías Blade de tipo LFP (litio-ferrofosfato) de BYD en el próximo CLA eléctrico. Por el momento no está claro si serán exclusivas del modelo destinado al mercado chino o si por el contrario también las montarán las unidades destinadas a otras regiones.

Es interesante recordar que BYD y Mercedes-Benz tienen un extenso historial de colaboración previo. Sin ir más lejos, en 2010 crearon conjuntamente la marca Denza, y si bien en 2021 los alemanes se deshicieron de gran parte de su participación en la joint venture, todavía retienen un 10%. Ya bajo el control total de BYD, Denza acaba de anunciar su expansión al mercado europeo.

El próximo Mercedes-Benz CLA se asentará sobre la plataforma modular MMA, que también sustentará a los nuevos GLA y GLB. Esta arquitectura de última generación se caracterizará por contar con un sistema de 800 voltios, lo que permitirá a la berlina eléctrica ofrecer unos niveles de eficiencia y unos tiempos de carga líderes en su categoría.

El Mercedes-Benz CLA eléctrico se lanzará en 2025

Durante la presentación del Concept CLA Class durante el reciente Salón del Automóvil de Múnich, Mercedes-Benz reveló que el modelo definitivo tendrá una autonomía superior a los 750 km WLTP, gracias principalmente a un reducidísimo consumo homologado de apenas 12 kWh/100 km. Las filtraciones de los últimos meses nos indican que su alcance oficial oscilará entre los 650 km WLTP de su variante de acceso y los 850 km WLTP de la más capaz.

Mientras que la primera empleará las antes citadas baterías LFP para contener al máximo los costes (no en vano, el CLA tendrá que resultar competitivo frente a rivales como el Polestar 2), la segunda equipará unas celdas NCM (níquel, cobalto, manganeso) con ánodo de óxido de silicio. Esta química también se utilizará en las versiones de altas prestaciones firmadas por AMG.

Aunque el nuevo Mercedes-Benz CLA verá la luz el año que viene, su llegada a los concesionarios se producirá ya entrados en 2025. Más adelante la gama se completará con la adición de una carrocería familiar Shooting Brake, más práctica que la berlina.

Fuente | CarNewsChina