Un grupo de investigación desarrolla un método para producir hidrógeno directamente con agua del mar

No es la primera vez que vemos un trabajo de un grupo de investigación que busca el santo grial. Obtener hidrógeno usando como material prima el agua del mar. Pero hasta ahora los trabajos involucraban el uso de complejos procesos de filtrado, desolación, purificación o alcalinización por ósmosis inversa. Ahora, un grupo internacional ha desarrollado una técnica capaz de obtener el vector energético directamente del agua del mar.

El equipo ha sido liderado por los técnicos de la Universidad de Adelaida, que han coordinado a un grupo de investigadores de la Universidad de Tianjin y la Universidad de Nankai de China, así como de la Universidad Estatal de Kent en los Estados Unidos.

Estos han publicado en la revista Nature los avances de un método mediante el cual se puede usar agua directamente del océano en un electrolizador comercial para producir hidrógeno verde, y además hacerlo de forma eficiente.

Y es que este es otro apartado clave, ya que muchos procesos revolucionarios además de proponer el uso de costosos materiales, algunos incluso por desarrollar como el grafeno. Pero en este caso se trata de un catalizador de diseño sencillo, compatible con los electrolizadores comerciales, capaz de trabajar directamente con el agua salada.

El equipo simplemente filtró el agua de mar, para eliminar los sólidos y los microorganismos, para obtener una materia prima idónea para la producción del vector.

Según los responsables del proyecto: «El rendimiento de un electrolizador comercial con nuestros catalizadores que funcionan con agua de mar, es similar al rendimiento de los catalizadores de platino/iridio que funcionan con agua desionizada altamente purificada»

Este desarrollo abre las puertas a eliminar una de las principales preocupaciones a la hora de obtener hidrógeno desde el agua, ya que su uso podría poner en riesgo el acceso al líquido en zonas con pocas reservas hídricas, y además se logra con un conjunto más sencillo y sobre el papel más económico. Queda por saber también otra parte fundamental, y esa saber si es también funcional.