Tres consejos para comprar un coche eléctrico de segunda mano
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Publicado: 03/03/2024 01:00
La movilidad avanza hacia la electrificación. Sin embargo, en la actualidad una de las principales barreras para comprar un eléctrico es su precio. Por eso, los coches de segunda mano baratos pueden ser una buena opción para aquellos que buscan desplazarse de forma más limpia y económica, pero quieren hacerlo con un desembolso más contenido.
Hasta hace pocos años, adquirir un vehículo eléctrico usado era misión imposible. Ahora que ya los primeros modelos vendidos con esta mecánica gozan de unos diez años, en el mercado de ocasión pueden encontrarse ofertas interesantes.
1. Su tecnología
Los coches eléctricos comenzaron a comercializarse en España alrededor del año 2010. Apenas han pasado poco más de 10 años desde entonces, pero la tecnología ha avanzado a pasos agigantados. Comparados con los modelos más recientes, los de principios de la década tenían ciertas limitaciones, principalmente en lo relacionado a las autonomías limitadas. Además, hay coches eléctricos que no usan el estándar de carga rápida CSS, el más extendido en Europa, lo que impide cargarlos en la mayoría de los puntos de recarga.
Al mencionar esto, no te estamos sugiriendo que descartes inmediatamente las primeras generaciones de todos los modelos. De hecho, dependiendo de tus necesidades, es posible que algunas limitaciones no sean un problema para ti. Pero sí queremos destacar la importancia de revisar con cuidado las especificaciones del modelo en cuestión.
2. Verifica el estado de la batería
Comprueba que la batería esté en buenas condiciones. Al ser uno de los componentes más caros, reemplazarla por una nueva elevaría considerablemente los gastos asociados a la compra de un coche eléctrico.
Es importante determinar si la batería cuenta con garantía. La mayoría de las marcas ofrecen cobertura durante los primeros 8 años o 160.000 kilómetros (el primer hito que se alcance) lo que supone que la mayor parte de los modelos posteriores a 2015 o 2016 pueden estar todavía en garantía.
También es importante conocer el nivel de degradación de la batería. Por ejemplo, si conserva el 80% de su capacidad original, significa que ofrecerá un 20% menos de autonomía.
Dependiendo del modelo, esta información aparecerá en el cuadro de instrumentos o se puede determinar con una aplicación para móviles y un teléfono conectado al puerto OBD. Pero la mejor manera de averiguarlo consiste en solicitar un certificado en un centro autorizado del fabricante. Es verdad que obtenerlo conlleva un coste extra, pero podría ahorrarte mucho dinero a la larga.
Una revisión de los logs de información que nos puede ofrecer otra info adicional, como el número de kilómetros reales, el número de cargas rápidas al que ha sido sometido…etc.
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3. Revisa distintos elementos del coche
Por último, hablamos de algunos componentes del vehículo que debes examinar con cuidado para determinar si te conviene comprar ese modelo y si el precio de venta es apropiado.
Lunas. Busca grietas o picotazos que indiquen la necesidad de un reemplazo inminente.
Frenos mecánicos. Aunque los coches eléctricos utilizan el freno regenerativo para hacer las paradas habituales, los frenos mecánicos son indispensables para detener la unidad en situaciones de emergencia. En este caso al contrario de los coches convencionales, hay que revisar también que estén en buen estado, pero por falta de uso. Algo que puede afectar principalmente a los frenos traseros.
Interiores. Comprueba el grado de desgaste de los asientos, el volante y la tapicería.
Neumáticos. Revisa la profundidad de sus dibujos y su caducidad.
Suspensiones. Si no están en buen estado, el confort y la seguridad se verán comprometidos, así que deberás sustituirlas.
Ahí lo tienes. Si pones en práctica estos consejos, podrás adquirir un coche eléctrico de segunda mano en excelentes condiciones y sin tener que gastar una gran fortuna.