Este propietario ha ahorrado más de 110.000 euros gracias a su Tesla Model S

Un Tesla Model S de 2018 ha recorrido más de 700.000 km y ha ahorrado a su propietario más de 110.000 euros en combustible y costes de mantenimiento.

Comprar un coche eléctrico es una alternativa muy interesante para reducir las emisiones contaminantes. Pero la realidad es que para una gran parte de los interesados, la principal motivación es el ahorro económico que permite lograr un sistema eléctrico. Algo que un propietario australiano ha podido comprobar de la mano de un Tesla Model S con el que en seis años ha ahorrado más del coste del vehículo.

Como recordamos, un coche eléctrico tiene un menor coste operativo, tanto en coste de la electricidad frente al combustible, como en mantenimientos.

Según un estudio de la Agencia de Medio Ambiente y Gestión de la Energía de Francia, los costes de mantenimiento de un coche eléctrico son alrededor de un 30% inferiores a los de un modelo con motor de combustión interna.

En cuanto a los costes energéticos, estos son de 3 a 4 veces inferiores a los que paga un conductor de un coche diésel o gasolina.

Hasta 18.300 euros de ahorro anuales con un coche eléctrico

Estas cifras por si ya son muy interesantes y pueden servir para animar a muchos clientes a dar el salto a un coche eléctrico. Pero la historia de un Nigel Raynard es todavía más alentadora, ya que ha logrado alcanzar un ahorro de más de 18.300 euros al año gracias a su Tesla Model S de 2018.

Raynard adquirió su Tesla Model S hace seis años para realizar traslados al aeropuerto como parte de su negocio de VTC.

En julio de 2021, el australiano decidió sustituir las pastillas de freno de su Model S, y publicó por primera vez en Twitter información sobre la distancia recorrida, concretamente 400.000 km. Lo que ya representa una distancia significativamente mayor que la que puede recorrer un modelo con motor térmico durante toda su vida útil. Pero para este Tesla, ha sido el momento de realizar su primer cambio de pastillas de freno.

Durante este tiempo, el Model S ha tenido que cambiar una vez de batería, a los 660.000 km, y continua trabajando ya con 700.000 km en su marcador. Y subiendo.

Según su propietario, desde que han comenzado a trabajar con esta unidad, ha ahorrado más de 110.000 euros. Esto ha sido posible gracias a factores como el menor coste de la electricidad, y a unos costes de mantenimiento relativamente bajos.

En lugar de cambios de aceite, filtros o correa cada ciertos kilómetros, este Model S sólo ha recibido un cambio de las pastillas de freno y el cambio de la batería en garantía durante los 700.000 kilómetros.

Curiosamente, Tesla le ha ofrecido a este propietario la posibilidad de cambiar su batería gratis en garantía, un pack de 75 kWh que tiene cobertura hasta 2026, o cambiarla por un pack de 90 kWh con un pequeño coste, que le ofrecería más autonomía. Pero el propietario ha optado por la primera opción.

Pero incluso en el peor de los casos, y que este conductor hubiese tenido que pagar de su bolsillo el cambio de la batería, los enormes ahorros logrados durante estos seis primeros años habrían compensado un coste que ronda los 15.000 euros, e incluso hacerlo más de una vez.

Un caso de éxito que nos muestra que no todos los Model S tienen que pasar por el purgatorio de los múltiples cambios de motor y batería, incluso en usos tan intensivos como este donde el vehículo debe recorrer más de 350 kilómetros cada día.

el propio Elon Musk indicó en su momento que la carrocería y los distintos elementos que componen el Model S, como la unidad de propulsión eléctrica, tienen una vida útil de alrededor de 1,6 millones de kilómetros.

Su batería, por su parte, es capaz de funcionar de media sin problemas hasta 800.000 km, con una fiabilidad que ha ido creciendo con el paso de los años donde Tesla ha ido acumulando experiencia, y donde ha añadido baterías de fabricantes como BYD o CATL a sus vehículos.