Elon Musk quiere acabar con las ayudas a los coches eléctricos, pero estuvo años beneficiándose de ellas
Elon Musk, CEO de Tesla, ha pedido en la red social X (Twitter) la supresión de las subvenciones estatales en toda la industria, incluyendo el crédito fiscal de 7.500 dólares ofrecido por el Gobierno estadounidense por la compra de un vehículo eléctrico. «Quitad los subsidios. [Eso] sólo ayudará a Tesla. ¡Además, eliminad los subsidios de todas las industrias!», ha escrito Musk en respuesta a un post que defendía la eliminación del crédito fiscal.
Estas declaraciones se han producido poco después de que Musk celebrara la elección de JD Vance como candidato a vicepresidente de Donald Trump, un senador republicano por Ohio que el año pasado propuso reemplazar las ayudas a los coches eléctricos por otras de cuantía equivalente para los automóviles de gasolina fabricados en Estados Unidos.
Ya en 2021, el polémico empresario defendió en una entrevista con The Wall Street Journal el final de los subsidios para los coches eléctricos. Cabe destacar que, por aquel entonces, Tesla había perdido el acceso al crédito fiscal por haber superado el límite de 200.000 vehículos por fabricante, el cual se suprimió en 2023.
«Vale la pena señalar que Tesla dejó de recibir [ayudas] hace dos años, mientras que todos los demás, excepto General Motors, siguen recibiendo el crédito fiscal de 7.500 dólares. Así que todas nuestras ventas de este año y del año pasado no tuvieron nada que ver con el crédito fiscal porque ya no somos elegibles por haber fabricado tantos coches eléctricos… Estoy diciendo literalmente que hay que deshacerse de todos los subsidios. Pero también para el petróleo y el gas».
Las ventas de coches eléctricos siguen dependiendo en gran medida de las ayudas estatales
Muchos internautas no han dudado en señalar que, durante la década pasada, Tesla se vio muy beneficiada por el crédito fiscal, que hacía más asequibles sus coches eléctricos. Musk solo pidió su supresión una vez sus modelos quedaron excluidos del programa por superar el límite de unidades vendidas.
A día de hoy, los requisitos han cambiado, lo que ha permitido a Tesla volver a tener acceso al crédito fiscal; sin embargo, lleva años de ventaja a competidores como Ford o General Motors a nivel de costes, motivo por el que ya no le hace falta ningún tipo de subvención para ofrecer un producto competitivo. Como bien indica Musk, su eliminación beneficiaría a la marca.
Esta no es la primera vez que Musk hace gala de su hipocresía en este campo. Durante década y media, Tesla fue una empresa deficitaria sostenida en gran medida por las ayudas californianas, pero tras su primer año completo con beneficios netos, en 2021 optó por mudarse a Texas, una región con una menor carga impositiva.
El directivo admitió abiertamente que esta decisión se tomó para pagar menos impuestos… tras años viviendo del contribuyente. California otorgó cientos de millones de dólares a Tesla en exenciones fiscales y adoptó numerosas políticas para fomentar la fabricación y compra de vehículos eléctricos, pero una vez la compañía dejó de necesitar apoyo y llegó el momento de aportar, Musk trasladó su sede a otro lugar.
Ya ha quedado demostrado en países como Alemania que las ventas de coches eléctricos continúan siendo muy dependientes de las ayudas estatales, algo que seguramente no cambie hasta la década que viene. Es posible que su final beneficiara a Tesla de forma individual, pero a todas luces resultaría muy perjudicial para el conjunto de la industria y para los objetivos de descarbonización del transporte.
Fuente | Teslarati