Comparativa de costes. Coche eléctrico contra coche de combustión: octubre 2024
Calculamos el coste de moverse con un coche eléctrico frente a un modelo diésel o gasolina según los precios de los carburantes y la electricidad en octubre de 2024.
7 min. lectura
Publicado: 27/10/2024 08:00
A pesar de que la compra de un coche eléctrico suele ser una alternativa más costosa que un coche diésel y gasolina o híbrido, su menor coste operativo puede compensar a medio y largo plazo esta diferencia. La pregunta es cuándo y cuánto. Algo en lo que puede tener su influencia desde el segmento de vehículo, hasta incluso el contrato eléctrico que tengamos en casa. Es por eso que vamos a comparar cifras según los datos actuales tanto del coste eléctrico, como de los carburantes.
La industria automovilística europea está en crisis. La débil demanda de coches eléctricos, los altos costes de producción, y la nueva competencia de China, están deprimiendo la confianza y las ventas, mientras avanzamos hacia el escenario 2035, donde no se podrán vender nuevos coches con motor de combustión.
La falta de acción eficaz y contundente por parte de los gobiernos europeos también afecta a la confianza de los consumidores, que empiezan no solo a dejar de comprar coches eléctricos, como está sucediendo en Alemania, sino que incluso están empezando a dejar de comprar coches convencionales. Algo que tendrá su impacto.
Pero los coches eléctricos recuperarán sus cifras antes o después, ya sea con modelos locales o importados. Es por eso que cada vez más gente está mirando si merece la pena realizar el esfuerzo extra de un eléctrico, comparando los costes operativos frente a los de combustión, principalmente por la bajada de la electricidad, que se ha estabilizado después de unos años de shock desde la agresión rusa a Ucrania.
¿Cuánto cuestan actualmente moverse en coche diésel o gasolina?
En la tendencia a largo plazo, los precios de los combustibles han aumentado significativamente en los últimos años. Los precios del diésel y la gasolina aumentaron especialmente de 2020 a 2022. El año de repostaje más caro de todos los tiempos fue 2022. Los conductores españoles llegaron a pagar 1.96 euros el litro de gasolina, y 1,82 euros por el diésel. En comparación con el año récord anterior de 2012, la gasolina era alrededor de 27 céntimos más cara, mientras que el precio por litro del diésel era casi 47 céntimos más alto que el nivel de 2012.
Este pasado verano, los precios cayeron, pero no se acercaron al nivel que tenían antes de 2020. Esto también se refleja en los costes del combustible. Según los datos, el precio medio de la gasolina es actualmente de 1,59 euros por litro, el nivel más bajo hasta ahora en 2024, mientras que el diésel de media está en los 1.48 euros el litro. Cifras muy por encima de 2020, cuando el diésel estaba a 1 euro el litro de media.
Según la herramienta de cálculo del coste de los vehículos en España de Motor.es, los coches gasolina gastan una media de 9.23 euros a los 100 kilómetros. Por su parte, los modelos diésel tienen un consumo medio de 6.9 euros cada 100 km.
En el caso de los coches eléctricos, esto dependerá en gran medida del contrato eléctrico que tengamos en casa, e incluso entrarán variables favorables, como que tengamos una instalación fotovoltaica, o negativos, como que tengamos que usar a menudo la red pública de carga rápida. Más cara que la doméstica.
Podemos echar un vistazo al comparador de tarifas eléctricas de la OCU, que nos muestra que hoy en día un contrato en el mercado libre, con una tarifa fija de dos horarios, nos permite acceder a costes de 15 céntimos de euro el kWh en diurna, y 9 céntimos en nocturna. Esto supone que cargando de día, nos saldrán los 100 km en 2.55 euros, mientras que en nocturna será de apenas 1.53 euros.
Por el contrario, si tenemos que echar mano de la carga rápida fuera de casa, el precio medio ronda los 45 céntimos el kWh, lo que el mismo trayecto nos costará en torno a los 7.65 euros.
Pero incluso en este apartado tenemos alternativas, como los sistemas de suscripción, que por una cuota mensual, que ronda los 10 euros de media, nos permite acceder a costes por kWh mucho más atractivos. Por ejemplo, la carga rápida baja de los 42 céntimos de euro a los 0.35, mientras que la carga más allá de los 50 kW baja hasta los 0.45 euros el kWh, por los 0.60 euros actuales. Nada menos que un 25% menos.
Resumen comparativa costes coches gasolina, diésel vs eléctrico:
Después de un año o 15.000 km
- Coche gasolina: 1.384 euros/año
- Coche diésel: 1.035 euros
- Coche eléctrico (carga doméstica): 300 euros
- Coche eléctrico carga rápida: 1.147 euros
Después de 5 años y 75.000 km
- Coche gasolina: 6.920 euros
- Coche diésel: 5.175 euros
- Coche eléctrico (carga doméstica): 1.500 euros
- Coche eléctrico carga rápida: 5.735 euros
Por supuesto, estamos haciendo una proyección a medio plazo donde muy posiblemente el precio de la electricidad no suba, principalmente por el cada vez mayor peso de las energías renovables, mientras que los carburantes siempre están supeditados a los movimientos de una geopolítica cada vez más compleja.
Tampoco contamos los ahorros en mantenimiento, y que puede variar de forma importante según el modelo, y que en el coche eléctrico son mucho más económicas, con revisiones anuales de apenas 100 euros, otras cada dos años por 150 euros…e incluso modelos que pueden alargar todavía más el paso por el taller, por donde solamente van a operaciones de revisión.
Solo teniendo en cuenta el coste del combustible, el propietario de un coche eléctrico estará ahorrando unos 1.084 euros al año respecto al modelo gasolina en «carburantes», o 5.420 euros después de cinco años. Una cifra que le habría permitido incluso invertir en un sistema fotovoltaico de 4 kW para su vivienda, y hacer de las cifras de ahorro a medio y largo plazo unos números incluso más llamativos.
Fuente | Motor.es