Renault rechaza las ayudas del PERTE VEC tras cancelar la asignación de un coche eléctrico a la planta de Valladolid

Renault ha renunciado a la subvención de 31.4 millones de euros concedida hace mes y medio por el Ministerio de Industria como parte del PERTE (Proyectos Estratégicos para la Recuperación y Transformación Económica) del Vehículo Eléctrico y Conectado, unos fondos que iban a destinarse a la implantación de una nueva plataforma eléctrica en la factoría de Valladolid, en la que actualmente se ensamblan los Captur y Symbioz.

A día de hoy, Renault produce el grueso de su gama eléctrica en ElectriCity, un polo industrial situado en el norte de Francia con capacidad para 600.000 unidades. A esto tendríamos que sumarle las 150.000 unidades que podrá fabricar Novo Mesto (Eslovenia) a partir de 2026.

En un primer momento, Renault planeaba vender anualmente en Europa hasta 1 millón de coches eléctricos para 2030, un objetivo que solo habría sido posible con el apoyo de sus plantas españolas; sin embargo, el enfriamiento de la demanda de este tipo de vehículos en los últimos tiempos ha llevado a la firma del rombo a adoptar un enfoque más conservador.

Actualmente, las plantas de Valladolid y Palencia se especializan en modelos híbridos; de hecho, Luca de Meo, CEO de la compañía, admitía recientemente que los sindicatos galos habían presionado para quedarse alguno de ellos, ya que la demanda de HEV (Hybrid Electric Vehicles) es muy superior a la de BEV (Battery Electric Vehicles).

Palencia y Valladolid seguirán produciendo modelos híbridos hasta nuevo aviso

A pesar de que la renuncia de Renault es una mala noticia para la industria española, lo cierto es que más que un adiós, se trata de un hasta luego. Y es que tarde o temprano Renault tendrá que asignar modelos eléctricos a sus fábricas nacionales, pues las ventas de automóviles térmicos quedarán prohibidas por la Unión Europea en 2035.

Para entonces, Renault necesitará haber transformado sus plantas españolas, puesto que Douai, Dieppe, Maubeuge y Novo Mesto no contarán con la suficiente capacidad como para cubrir el volumen total de la marca. Sus centros marroquíes y turcos probablemente sigan dedicados a los vehículos con motor de combustión interna.

De Meo, que también es presidente de ACEA (Asociación Europea de Fabricantes de Automóviles), se reunió ayer con Pedro Sánchez, presidente del Gobierno, y le instó a tomar medidas para impulsar las ventas de coches eléctricos en el país de cara al año que viene. De lo contrario, Renault podría verse obligada a reducir su output de coches térmicos para cumplir con los nuevos límites de emisiones europeos, algo que afectaría directamente a las plantas españolas.

Fuente | ABC