Al volante del Porsche 918 Spyder

Hace unas semanas lo hemos visto probando el exclusivo Mercedes SLS eléctrico y ahora Chris Harris, de la revista Drive ha tenido el privilegio de ponerse a los mandos de uno de los modelos eléctricos más inalcanzables del momento, el Porsche 918 Spyder.

Después de recibir una larga explicación de la filosofía del nuevo modelo del fabricante alemán, Chris ha tenido a su disposición durante apenas tres vueltas un super deportivo híbrido enchufable que además de enormes potencia, llega también con un halo de sostenibilidad bajo el brazo que permita a los grandes deportivos sobrevivir a las cada vez más duras normativas sobre emisiones, algo que nos recuerda lo que Jay Leno ha dicho en una ocasión, los motores eléctricos salvarán a los grandes motores.

Como decimos, no es un coche cualquiera y ha necesitado cinco minutos para llegar al momento de comenzar la corta prueba, un test realizado en un trazado mojado que pondrá a prueba la habilidad de los pilotos, la puesta a punto del coche, y los nervios de los técnicos de Porsche desplazados al evento.

Y no es para menos ya que en las manos de estos periodistas han puesto unos prototipos que una vez llegados a producción costarán nada menos que 770.000 euros cada unidad, un monstruo con 767 CV de potencia conjunta entre su motor gasolina y sus dos motores eléctricos capaz de recorrer los 20.8 kilómetros de Nürburgring en apenas 7 minutos y 14 segundos.

Como podemos ver en el vídeo, hasta los 150 km/h el Porsche es impulsado por los dos motores eléctricos, una conducción silenciosa y unas reacciones que el conductor compara con las de un Cayenne diésel, pero en el momento de pisar a fondo el acelerador incluso con carga en las baterías, entra en acción el estruendoso motor gasolina que con un bramido aumenta la potencia disponible bajo el pié derecho, siendo el retorno al modo eléctrico tan sencillo como reducir la aceleración y la velocidad.

Son tres los modos de conducción y de esa manera el conductor puede con un selector cambiar a modo híbrido, donde el motor eléctrico pasa a un segundo plano y el vehículo utiliza solamente el motor de combustión. El tercer modo es el Sport, que como su nombre indica pone a disposición del piloto toda la potencia del motor gasolina y la de los dos motores eléctricos, un modo pensado para lograr las mejores prestaciones aunque a costa de la eficiencia.

Sin duda una autentica máquina de grandes prestaciones pero que por momentos nos lleva a los viejos tiempos donde los motores de combustión eran la única solución, con su ruido, su entrega de par y unos cambios de marchas que castigan a la espalda y cuello del conductor, algo que modelos como el Rimac Concept One o el Tesla Model S Performance y su propulsión totalmente eléctrica no tienen que sufrir.

Sin duda después de ver y sobre todo escuchar este modelo en marcha, nos da todavía más pena que Porsche no se haya animado a electrificar totalmente el 918, y al final ha creado un Toyota Prius enchufable de altas prestaciones y precio totalmente astronómico.

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