Ventas del Model S en Europa. Fuerte en Noruega, débil en el resto
3 min. lectura
Publicado: 04/04/2014 11:58
Es curiosa la distribución de ventas del Model S en Europa. Durante el pasado mes de marzo ha logrado una cifra simplemente espectacular en Noruega. Con sus apenas 4 millones de habitantes, el país nórdico se ha convertido en el segundo mercado después de Estados Unidos.
Pero el problema para Tesla es que a pesar del esfuerzo que está realizando en otros mercados, como Alemania, las ventas no acaban de arrancar. Como recordamos, la red de supercargadores se está extendiendo por el viejo continente, e incluso a finales de año se espera llegue al sur. Pero esto no parece suficiente para convencer a un mayor número de clientes más allá de la frontera noruega.
En Alemania apenas se han entregado 96 unidades en los dos primeros meses del año. Ni los supercargadores, ni la promesa de una versión deslimitada preparada para las velocidades de las autobahn han convencido a los alemanes. Podría ser algo previsible si pensamos en el proteccionismo de los germanos hacía sus fabricantes.
En Holanda por su parte el Model S ha logrado en marzo entregar 190 unidades. Una buena cifra en el segundo mercado del coche eléctrico por ventas en Europa. Pero se trata de una cifra muy alejada del primer clasificado en este mercado, el Mitsubishi Outlander PHEV, que ha conseguido 931 unidades, seguido del Volvo V60 enchufable, con 459.
Suecia es otro de los países que ha publicado sus ventas. En este de nuevo el Outlander PHEV se ha situado también primero en número de ventas, con 144 unidades. El Tesla se ha tenido que conformar con apenas 26 unidades, para un total de 34 en todo el 2014. Unas cifras muy lejanas a los de sus vecinos noruegos. En Francia tampoco están las cosas demasiado bien y a pesar de contar con cinco tiendas y servicios técnicos, sólo se han vendido 25 Model S en marzo.
La cuestión es saber si será suficiente para Tesla unas ventas tan bajas en toda Europa, para justificar la presencia de decenas de tiendas y una red de supercargadores. La otra pregunta es saber si con la expansión de los propios supercargadores, las ventas se ampliarán. Algo que no ha sucedido en Alemania, donde Tesla se ha empeñado en triunfar, cuando tal vez deberían centrar sus esfuerzos en otros mercados menos difíciles.